El complejo avícola, al igual que otros sectores atraviesa un 2022 complicado, tras una sequía que encareció los insumos como los balan­ceados para la producción de aves, a lo que se sumaron otros factores internos como el contrabando, el aumento generalizado de precios y el combustible que también impacta en la operatividad de las industrias.

Gerónimo Vargas, directivo del Pollpar y representante de la Cámara Paraguaya de Carnes (CPC), dijo que se está dando una situación paralela conforme al comportamiento local e inter­nacional. “En el mercado local estamos viendo una resentida demanda, muy perjudicada y creemos que ese por el factor contrabando así como que la ciudadanía tiene menor dispo­nibilidad o poder adquisitivo por los altos precios”, expreso.

Por otro lado, se está dando una faltante de pollos en el resto del mundo, es decir, una demanda activa en el mercado internacional, en el que Paraguay está siendo bastante competitivo, lo que le genera muy buenas oportu­nidades de exportación con­forme la receptividad que están teniendo de los clientes de afuera, explicó.

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Consul­tado sobre los mercados más demandantes, afirmó que África y el este europeo están comprando mucho pollo, pero que en general hay una dinámica interesante a nivel global, lo cual compensa en cierta medida la caída local, dijo en relación a la experien­cia de la citada empresa. En los recientes datos del Senacsa se observa que al menos las exportaciones acumuladas de enero a mayo de este año, tuvieron un leve aumento del 4,1% en los ingresos, por los US$ 2,4 millones frente a los US$ 2,3 millones del 2021.

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