Que Paraguay haya logrado un crecimiento sostenido en los negocios en los últimos años, es señal de que además de la productividad tuvo que acogerse a principios que garanticen confiabilidad con acciones encaradas tanto desde el sector público como privado.
Una de ellas fue la Resolución N° 16 del Banco Central del Paraguay (BCP), con la actualización del Reglamento de Gobierno Corporativo para todos los organismos bajo supervisión de la Superintendencia de Bancos y la Superintendencia de Seguros, con principios de cumplimiento de los cuales fueron dispuestos en el 2004 por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Con relación a este avance, la Asociación Paraguaya de Compliance (APAC) realizó el miércoles el encuentro que abordó el tema “Ética, compliance y gobierno corporativo”, que contó con una serie de presentaciones que incluyó a instituciones públicas así como a referentes locales y la exposición internacional de la argentina María Cecilia de Maio, consultora de cumplimiento, inteligencia empresarial e investigaciones, y socia honoraria de APAC.
El objetivo de la actividad fue “Promover la adopción de las mejores prácticas en materia de integridad, ética y cumplimiento, a más de fomentar el intercambio de experiencia profesional, empresarial y filantrópica entre los profesionales.
La experta ahondó sobre gobierno corporativo, ya que en cualquier empresa o entidad, por lo general se tiene a los propietarios y por otro lado al management, que es la dirección, por lo que se trata de la división de la propiedad y el funcionamiento de una compañía. Esto, teniendo en cuenta que cada uno tiene su propio objetivo, siempre en beneficio de la empresa, pero lo que vienen a establecer estos principios es el cómo hacerlo para que las personas trabajen buscando la mejor opción a largo plazo.
“Estos principios son normas de cómo puede estructurarse y funcionar el gobierno de una empresa para que tenga éxito, que es lo que buscan los accionistas para lo cual trabajan los directores”, expresó la consultora.
Si bien los principios hablan para todo tipo de empresas, Paraguay lo que adoptó hasta ahora es para todo aquello que está regulado por ambas superintendencias nombradas, como las diferencias entre la figura del presidente y del director ejecutivo para que todos los miembros se supervisen entre sí, y a favor de la subsistencia de la compañía.