Paraguay enfrenta un escenario económico desafiante en este 2022, donde un “cóctel” de factores externos se suma a los problemas internos que desfavorecen la dinámica de expansión del producto. En diciembre pasado se pronosticaba un crecimiento del orden del 4% para este año, pero se realizan actualizaciones de los números, en las cuales los recortes de perspectivas son cada vez más fuertes. De acuerdo a todas las entidades que actualizaron sus expectativas, Paraguay crecerá muy por debajo de lo que se esperaba hace 5 meses atrás, mientras que algunos incluso ya esperan una caída económica, por lo que el producto interno bruto (PIB) ingresaría en un escenario negativo.
El martes, la organización Desarrollo en Democracia (Dende) presentó las Perspectivas 2022, con una fuerte corrección a la baja. Dende espera una caída de 1,2% del PIB para este año, muy por debajo de la estimación oficial del 0,2% emitida por el Banco Central del Paraguay (BCP). La cifra estimada es una de las más bajas esperadas hasta el momento.
Entre las que ya vaticinan una caída del PIB para el cierre de este ejercicio está la consultora Basanomics, que prevé entre -0,5% y 1% de variación, mientras que Itaú, en su informe mensual, mantuvo su pronóstico de -1,7%. La consultora MF Economía había adelantado que el PIB iría a -1,8% inclusive.
Por otra parte, pese a que recortaron fuertemente sus números, entidades internacionales mantienen todavía al PIB de Paraguay en el escenario positivo, aunque algunos, como el BCP, muy cercano al 0%. Los panelistas internacionales de FocusEconomics, para su informe Latin Focus, esperan todavía una expansión económica local de 2,2%, la cifra más optimista hasta el momento.
Los agentes económicos del mercado local siguen con un pronóstico de 2%, mientras que el Banco Mundial estima una expansión de 1,5%. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) se ubican por debajo de los demás, con 0,7% y 0,3%, respectivamente.
RUSIA Y UCRANIA
La economía se ve afectada claramente porque la invasión rusa a Ucrania tiene su impacto en toda la cadena logística y, sobre todo, en los precios de alimentos y de combustibles. La invasión rusa a Ucrania todavía sigue generando una gran incertidumbre y por lo que se observa será un conflicto largo, sostuvo el economista Alberto Acosta Garbarino, titular de Dende. Exteriorizó su preocupación por el año electoral, pues hace tiempo nuestro país se concentra más en la política electoral y no en las políticas públicas, las cuales son necesarias para brindar mejores servicios estatales.
PUNTO DE INFLEXIÓN
El economista y ex ministro de Hacienda César Barreto sostuvo que, en términos de desarrollo, el país está en un punto de inflexión muy importante, ya que, con la pandemia, se agotaron los márgenes de endeudamiento que se tenían y que se utilizaron en estos años.
Todo se debe enfocar para invertir en infraestructura y sostener un cierto ritmo de crecimiento económico, después del fin del boom de los precios internacionales de commodities que dio un gran impulso entre el 2004 y el 2014 al Paraguay.