La economía paraguaya arrancó el 2022 con situaciones desfavorables que disminuyeron la dinámica, afectando fuertemente a la producción y direccionando a recortes de las proyecciones de crecimiento para este año. La actividad económica cayó duramente y los indicadores de corto plazo mostraron algunos resultados desfavorables. Sin embargo, el nivel de morosidad en el sistema financiero permanece bajo, según los últimos datos del Banco Central del Paraguay (BCP), que al cierre de marzo fue de 2,47%.
En un análisis de la consultora privada Mentu se resalta que si bien la coyuntura actual es compleja y desafiante, en particular para los sectores que lograron recuperarse con dificultades luego de la pandemia, la tasa general de morosidad del sistema bancario sigue por debajo de lo registrado en el 2021, aunque vino aumentando durante los últimos meses. “Considerando el hecho de que las proyecciones estiman una mejora recién a partir del segundo semestre del corriente año, la morosidad de algunos sectores podría incrementarse”, agregaron los economistas de la institución.
En ese sentido, el análisis de las tasas de morosidad de los sectores no tradicionales, como construcción, servicios, venta y reparación de vehículos, servicios personales y otros sectores económicos verificaron aumentos, que si bien fueron mitigados por la caída en las tasas de morosidad de los demás sectores, reflejan señales de atención.
Por el lado de los créditos al consumo y al comercio (los de mayor participación en la cartera), pese a que sus tasas de interés se han incrementado en los últimos meses, sus tasas de morosidad bajas aún permiten un margen para trabajar con herramientas que ayuden a los agentes a cumplir con sus obligaciones, añadieron.
CONSUMO
Por su parte, el funcionario del Departamento de Estadística del BCP, Bernardo Rojas, mencionó que al desglosar la morosidad por sector continúa centrado en lo que respecta a los créditos más riesgosos, como el de consumo, que se ubica por arriba del 4%. “Este es uno de los sectores que siempre registran altas tasas de morosidad, mientras que los demás mantienen niveles bajos, incluso por debajo del promedio”, dijo.
“Hay que mencionar que en el consumo, sobre todo en la parte del crédito en moneda nacional, es el más importante, por lo que la mayor tasa que se observa influye en el promedio que finalmente se reporta”, especificó.