La suba de precios generalizada afecta a toda la economía, que de alguna manera tiene que convivir con las consecuencias. Este es el caso del sector de la construcción, que reitera su preocupación por los altos precios de la materia prima.
Daniel Díaz de Vivar, presidente de la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco), explicó que como gremio solicitaron participar en algunas de las mesas de reuniones, así como solicitaron a que se abra la estructura de costos para saber cómo se compone el precio final de los insumos del combustible.
“El sector de la construcción es el que más consume combustible. Estas variaciones que hemos visto, que fueron para arriba y luego bajan, que genera una imprevisibilidad de cuánto estará el precio del combustible a futuro, nos pone realmente en jaque. Eso porque nosotros cotizamos a un precio y luego nos encontramos con aumentos que no están previstos, sino inflados y eso patea contra las empresas”, manifestó.
El empresario mencionó que los insumos empezaron a subir desde hace tiempo, solo el combustible se registró este año, pero el hierro ya el año pasado tuvo una variación importante, casi del 60%, así como también subieron el precio de los vidrios y los plásticos, además de los fletes internacionales y maquinarias, entre otros.
“Realmente hubo un aumento a nivel mundial, ya que el mundo estuvo parado durante un año, donde recién en el 2021 se empezó a reactivar en varias economías, por lo que la demanda fue mucho mayor a la oferta, lo que hizo que el precio suba”, explicó.
SIN RESPUESTA
Conforme a la solicitud de una mesa de trabajo, el titular de Capaco dijo que todavía no recibieron ninguna respuesta por parte del Gobierno. “En alguna de las conversaciones, por ejemplo, me hubiera gustado que Petropar tenga un consejo representado por los gremios. También creemos que es importante que cuente con un consejero por parte del sector privado”, indicó.
El empresario afirmó que conversaron con las autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), así como con la Unión Industrial Paraguay (UIP), y enviaron notas a Petropar.