No es nuevo que Brasil sea uno de los destinos preferidos por los paraguayos, pues en plena pandemia, con las primeras medidas sanitarias que empezaron a permitir el ingreso de turistas, fue el primero en ser visitado. Según Migraciones, para esta Semana Santa estuvieron cruzando la frontera al menos 2.000 paraguayos por día con destino al vecino país.
Lo que muchos quizás no sabían es que Brasil también resulta una alternativa interesante para realizar turismo religioso, pues cuenta con ocho iglesias que no solo son lugares de devoción, sino un patrimonio arquitectónico.
Entre ellas están la iglesia de San Francisco de Asís, en Belo Horizonte, un verdadero museo en forma de templo. Muchos no saben que en lo alto del Corcovado, en la base que sostiene la estatua del Cristo Redentor, hay una pequeña capilla impecablemente decorada y con vocación internacional, denominada como la iglesia de Nuestra Señora de Aparecida. También está la iglesia Nuestra Señora de Loreto, en Ilha dos Frades, Bahía; la iglesia de Nuestra Señora de Brasil en San Pablo, o la Catedral Metropolitana en Brasilia, entre otras.