Con la producción todavía incipiente del cannabis para uso industrial no psicoactivo, Paraguay ya logró exportar más de 80 productos terminados con cannabis como cerveza, proteínas, variedad de alimentos, aceites, cosméticos, medicina como goteros sublinguales para la ansiedad, insomnio, estrés, epilepsia, convulsiones, autismo, diabetes, alzheimer, entre otros.
Esto debido al gran potencial latente que se introdujo incluso en la agricultura familiar campesina, más el rendimiento del rubro, el fin es impulsar su cultivo a mayor escala, llegando a las escuelas autosustentables como parte de la producción.
Es lo que se pretende a través de un reciente convenio de cooperación interinstitucional firmado entre la Cámara de Cáñamo Industrial del Paraguay (CCIP) y la Fundación Paraguaya, por medio del cual se impulsará la industria de cáñamo en las escuelas agrícolas de la Fundación Paraguaya y se implementará el programa del Semáforo de Eliminación de la Pobreza con los colaboradores, familias y productores agropecuarios de cáñamo.
La idea es que además de introducir el cultivo del cáñamo industrial, la alianza pueda asistir con la capacitación de alumnos en el cultivo y procesamiento de esta variedad de cannabis en las escuelas agrícolas autosostenibles de la Fundación Paraguaya, para el desarrollo de productos con valor agregado, a más de la implementación del Semáforo de Eliminación de Pobreza con colaboradores de la empresa Healthy Grains, que forma parte de la cámara.
Marcelo Demp, presidente de la CCCIP, dijo que la cámara financiará las semillas que serán cultivadas por los alumnos, a más de brindar asistencia técnica agronómica y capacitación a todos. “Algunas empresas con licencia, que forman parte de la cámara, van a comprar el 100% de la producción, a un precio preestablecido por contrato, y en una segunda etapa queremos generar productos terminados en alimentos, aceites y otros que se puedan fabricar en la Escuela Agrícola de Cerrito para exportar al mundo”, expresó.