Hace más de una década, la compañía desarrolló una política marco de manejo de agua basado en cuatro pilares: proteger cuencas; reabastecer el agua que utiliza en sus bebidas; reducir el consumo de agua en sus plantas, y reciclar el agua de sus procesos productivos.
A nivel local, en la planta embotelladora de Coca-Cola Paresa se ha logrado reducir en los últimos cinco años la utilización del agua en los procesos productivos en un 25% gracias a inversiones continuas en tecnología y mejora de eficiencia. Asimismo, se desarrollan diversas iniciativas dedicadas al cuidado y acceso a agua potable en el país, liderando proyectos como Y Kuaá, parte del programa regional Lazos de Agua y Sonidos de Ñemby.