La semana pasada surgió el proyecto de dejar de lado, de manera momentánea, el impuesto selectivo al consumo (ISC) a los combustibles como una medida para evitar el impacto local fuerte de la suba del precio internacional del petróleo. Sin embargo, ya adelantan que eso generaría un grave efecto en el Estado, por lo que se deben buscar alternativas.
“No es posible ni razonable eliminar el impuesto selectivo a los combustibles en Paraguay. Eso generará un agujero de casi US$ 400 millones en las finanzas públicas. Poner un tope al monto tomando como referencia un precio de US$ 80/barril de petróleo sería más sensato”, señaló el economista y ex ministro de Hacienda, César Barreto, en su cuenta de Twitter.
En ese sentido, aclaró que su planteamiento es poner un monto máximo al impuesto que hoy es un porcentaje del precio del combustible al consumidor. “En qué valor fijar el tope? Al que regía cuando el precio del petróleo estuvo en US$ 80 por barril”, especificó.
Agregó que hace años se reclamaba racionalizar y mejorar el gasto público, pero desfinanciar al Estado no mejorará en nada, ampliará el déficit y creará un gran desorden fiscal que terminará en una inflación alta. Un país desordenado solo ampliará la pobreza, sin esperanzas, remarcó.
PROYECTO DE LEY
El senador liberal Salyn Buzarquis presentó el viernes un proyecto de ley que pretende reducir el precio del combustible trasladando el impuesto selectivo al consumo (ISC) a otros rubros o eliminar el impuesto a los carburantes.
El proyecto “Que reforma el tratamiento impositivo, precios de transferencia y sistematización operacional del rubro importación, blending y ventas de combustibles derivados del petróleo y su impacto positivo” busca trasladar el ISC del combustible a rubros como perfumes, bebidas azucaradas, alcohol y vehículos de alta gama, con lo que se pretende reducir el precio del combustible, dijo Buzarquis en una conferencia de prensa.
MENOS RECAUDACIÓN
Si bien el Impuesto al Valor Agregado (IVA) es la mayor fuente de ingresos tributarios del país, con la medida adoptada por el Gobierno de reducir el aporte del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a los combustibles impactó de alguna manera en las recaudaciones totales, pues el Estado dejó de percibir unos US$ 12 millones a raíz de eso, según explicó el viceministro de la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), Óscar Orué.
El Poder Ejecutivo anunció a inicios del mes de febrero la reducción del ISC al diésel común del 18% a 6,2%. En el caso de los otros combustibles, también se bajaron las tasas de la nafta virgen de 20% a 10% y del Ron 91 de 34% a 30,7%. Estas son las dos naftas que se utilizan para la mezcla y determinar los distintos tipos de calidad y octanaje, aunque en este caso la reducción del impuesto solo permitirá “congelar” los precios.