El contrabando sigue su curso en Paraguay, a pesar de las múltiples denuncias y con pruebas con­tundentes; principalmente de productos argentinos, entre ellos de primera necesidad dentro de la canasta familiar. La situación pone en jaque a la industria nacional, que ya se ve afectada no solo en la pro­ducción, sino en mantener las fuentes laborales.

Las pérdidas económicas para el mercado nacional son incontables. Solo en dos sec­tores, Paraguay pierde 2.400 sueldos mensuales para tra­bajadores, remarcó el empre­sario Pedro Galli, presidente de la Feprinco y de la ARP. Comentó, además, que Tri­butación deja de facturar por calzados de contrabando, el dinero suficiente para cons­truir 100 aulas al año o equi­par hospitales distritales.

En el sector calzado se estima que existen 15 millones de pares de consumo interno a nivel nacional, de los cuales la industria nacional no llega al 20% del mercado, según la Cámara de la Industria del Calzado de Paraguay. “El Gobierno tiene que controlar internamente vemos que las mercaderías circulan libre­mente por el país una vez que pasan la frontera con solo pagar alguna coima. Nadie les ataja ni se controla a los comercios a ver si emiten fac­tura legal o si los empleados están en el IPS”, sentenció Elzear Salemma, el presi­dente del CIP.

El empresario y ex titular de la Cámara de Anunciantes del Paraguay, Carlos Jorge Biedermann, manifestó que el contrabando es uno de los principales males que afec­tan a la economía nacional, así como a las empresas bien constituidas y, por ende, a los trabajadores paraguayos.

“Es un problema para lo cual no se está haciendo lo sufi­ciente, se agarran a 10, pero pasan 10.000. Todo es parte del mismo árbol, la informa­lidad está casi injustificada”, sostuvo. Señaló que cuando lo ilegal se convierte en social y cultural, eso se convierte en un problema mucho más grave aún.

Comentó que el mundo está con problemas, la pandemia precipitó una serie de temas como el combustible, el costo de los containers. “Eso causa la inflación exógena, y luego el contrabando a nivel regional, que proviene de países como Argentina y Brasil”, dijo.

Hace unos días, la Unión Industrial Paraguaya (UIP) mostró mediante un video cómo se mueve el contrabando en nuestro país ante la vista de todos. Enrique Duarte, presi­dente de la UIP, indicó que a plena luz del día y sin disimulo se ingresa masivamente los productos de contrabando, y resaltó que existen evidencias de ello por todos lados.

En ese sentido, el empresario expuso el video de un camión con 30 toneladas de cebollas que circula por una calle vecinal en muy mal estado, y otro de un bote cruzando en la zona de Nanawa. “El con­trabando está en la calle, no hay necesidad ni siquiera de recurrir a videos. Las prue­bas las tenemos todos los días”, resaltó Duarte. “Más de 30 mil personas se dedican a la avicultura en Paraguay y están en riesgo sus traba­jos. Mucha gente está sacrifi­cando sus animales”, expresó Blanca Ceuppens, miembro de Avipar.