Robert Bosch, directivo de la empresa Terminales y Logís­tica Portuaria SA (TLP), pre­cisó que con los problemas de navegabilidad, sumado al aumento de la cotización del petróleo a nivel internacional y la suba del dólar ante el gua­raní provocarán un nuevo ajuste al alza en el precio de los combustibles. “Todos los barcos y embarcaciones están llegando con un tercio de su capacidad, otros vienen con un 50 a 60% menos en las barcazas.

No hay caso, va a tener que subir el precio del combusti­ble. Por lo menos el diésel ten­dría que subir en el orden de los 400 a 500 guaraníes. La nafta 200 o 300 guaraníes”, expresó. Se menciona que los ajustes se harían antes de que termine la segunda semana de octubre y que incluso podría volver a realizarse otra alza en el mes de noviembre.

Por su parte, el titular de Petróleos Paraguayos (Petro­par), Denis Lichi, dijo que la empresa estatal, que comer­cializa diferentes tipos de combustibles, intentará sos­tener el precio actual el mayor tiempo posible, teniendo en cuenta que la mayoría de los emblemas privados se apresta a reajustar los precios finales que una vez más recaerá sobre los consumidores.

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“El mayor problema es que los precios suben a nivel interna­cional. No puedo decir si va a subir o no. Todo es muy sub­jetivo en cuanto al tiempo que podamos aguantar”, mani­festó Lichi. Mencionó que además del aumento del pre­cio del petróleo a nivel inter­nacional y la continua suba del dólar, ahora tropiezan con los problemas generados por la bajante de los ríos Para­guay y Paraná. “Es muy difí­cil hacer llegar el combustible hasta los centros de distribu­ción”, reconoció.

Solo en el 2021, los precios de los combustibles se incre­mentaron en G. 1.200 por litro. El 1er reajuste se realizó en febrero, cuando el precio aumentó unos G. 400, luego volvió a modificarse en dos oportunidades más.

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