“Se duplicó la cantidad de socios de la cooperativa Kóga Poty, de 30 campesinos pasamos a ser 62, y cada semana se van sumando nuevas personas porque cada vez más familias campesinas trabajan en la producción de soja y maíz”, comentó Julio Chilavert, productor y miembro de la mencionada cooperativa en San Pedro.
Julio cuenta con 12 hectáreas mecanizadas de maíz que rota con soja. “Cosecharé mi maíz en un mes más y luego me prepararé para sembrar soja. Por suerte la helada no nos afectó demasiado en el cultivo de maíz porque los granos del choclo ya están duros. Estimo que tendré un rendimiento de 3.500 kilos por hectárea, aproximadamente”, expresó.
Asimismo, contó que en conjunto con su padre, Milciades Chilavert, logró mecanizar sus cultivos de soja y maíz. “Nos costó bastante ampliar nuestra producción, empezamos sin nada y hoy día tenemos maquinarias de primera. Ayudamos bastante a nuestros vecinos a cultivar soja y maíz porque sabemos lo difícil que es al principio. Sin embargo, todos se dan cuenta de que son cultivos rentables”, manifestó el agricultor.
Comentó que la mayoría de los pobladores de la zona se oponían al cultivo de granos y creaban conflictos violentos, pero que a pesar de esto, hoy día se duplicó la cantidad de campesinos asociados a la cooperativa de producción Kóga Poty para empezar a cultivar granos. En lo relacionado con la superficie de pequeños productores de San Pedro, según un relevamiento hecho por la Unión de Gremios de la Producción, en dicho departamento hay 47.299 hectáreas de soja en manos de pequeños agricultores con menos de 20 hectáreas.