Bariloche es el destino más visitado de la Patagonia; sus bosques milenarios, montañas cubiertas de nieve y lagos cristalinos la convierten en una anfitriona por excelencia. Además de sus paisajes majestuosos, en el 2012 fue declarada capital nacional del turismo de aventura, y en el 2015 capital nacional del chocolate. San Carlos de Bariloche está ubicada dentro del parque nacional Nahuel Huapi, junto a la Cordillera de los Andes, y a 1.680 km de Buenos Aires. Es visitada todo el año por más de un millón de turistas de países vecinos y Europa, por la gran variedad de atractivos naturales, culturales y artísticos que ofrece. Se suma un arte culinario autóctono, mezclado con aportes europeos, y preparación exclusiva de chocolates y cervezas.
PRIMAVERA-VERANO
Es la época ideal y el lugar perfecto para los amantes del turismo aventura y de playas y paisajes imposibles de olvidar. Comienzan todas las actividades al aire libre: paseos, cabalgatas y excursiones lacustres. La diversión en el agua también es variada: buceo, kayak, kitesurf, navegación, pesca y stand up paddle. Los lagos Nahuel Huapi y Mascardi ofrecen playas para disfrutar de un picnic en familia o con amigos. Y toda una red de refugios de montaña que invita a los aventureros a realizar trekking de montaña. Destaca el Cerro Tronador, de 3.554 metros de altura.
OTOÑO-INVIERNO
El otoño deslumbra con bellísimos atardeceres. También se celebra la Fiesta Nacional del Chocolate, donde se disfrutan las exquisiteces que preparan los expertos chocolateros. Época ideal para pasar por Circuito Chico, el recorrido que atraviesa bosques, lagos y montañas, pasando por el emblemático Llao Llao.
El invierno en la región está hecho para disfrutar en familia y con amigos: esquiando, haciendo snowboard, o desplazándose en moto de nieve. La Fiesta Nacional de la Nieve llega con actividades y eventos: shows, concursos, y eventos deportivos.
Cultura y entretenimiento. Para los amantes de la cultura, Bariloche cuenta con varios museos y galerías de arte, entre los que se destacan: Museo de la Patagonia, Museo Geológico Rosendo Pascual, Museo Paleontológico, Museo del Chocolate y la Galería de Arte Cerro Otto. De la noche se adueñan discotecas, cervecerías, bares, y pubs. El centro de la ciudad ofrece numerosos locales con música vibrante y pistas para todos los gustos.
En cuanto a gastronomía, comer es una pasión de los argentinos, y la gastronomía es protagonista todo el año. Cordero patagónico, trucha, diferentes ahumados, famosos por su sabor y calidad son el complemento ideal para un viaje lleno de emociones.
Bariloche es la capital nacional del chocolate, por eso todos los visitantes pueden recorrer las chocolaterías, dónde el producto se elabora a la vista. Además, están presentes en confiterías y salones de té que ofrecen la ceremonia de esta infusión y los tradicionales scones y tortas dulces. Como broche de oro, en Bariloche se produce cerveza artesanal desde hace casi 100 años. Un recorrido por las cervecerías se convierte en una verdadera “ruta cervecera”. Las autoridades de dicha ciudad animan a no perder Bariloche como próximo destino.