El proceso de digitalización del comercio paraguayo continúa mediante la transición de las compras presenciales en tiendas, shoppings y supermercados hacia los nuevos canales de venta, bienes y servicios disponibles.
Es así que en mayo se realizaron 629.728 compras por internet que fueron pagadas con tarjeta de crédito, por valor de G. 37,8 miles de millones, según datos del Banco Central del Paraguay (BCP).
Dichos datos, nunca antes registrados, son superiores mensual e interanualmente. Además, la cantidad de transacciones ya representa cerca de 30% de las compras totales pagadas con tarjeta de crédito; que anteriormente eran dominadas por los pagos mediante los dispositivos POS, los cuales se mantienen relativamente constantes.
NO SOLO IMPULSÓ CRECIMIENTO
Por tanto, Internet no sólo impulsó el crecimiento de los pagos con tarjetas de crédito en general, sino que hoy 3 de cada 10 compras con el instrumento se realizan a través de este canal, señala el análisis al respecto de la consultora Mentu.
“En vista de la adaptación de muchos comercios locales a plataformas, aplicaciones y mecanismos mayormente digitales, deberían plantearse estrategias de políticas que estén relacionadas con la ciberseguridad y protección al comerciante y al consumidor”, agrega el análisis.
ENTIDADES DE MEDIOS DE PAGO
Por otro lado, en abril, la cantidad de cuentas existentes, entre activas e inactivas, aptas para realizar transacciones a través de Entidades de Medios de Pago Electrónicos (EMPEs) superó los 6 millones, que al compararla con la población estimada del país en 2021, arroja que el 81,8% dispone de una cuenta.
Pese a ello, el monto total de las transacciones se redujo en 4,8% a G. 1,04 billones con relación a marzo debido en parte a la disminución de establecimientos a nivel país por segundo mes consecutivo tras la finalización de los programas de asistencia por la pandemia.
Dicha situación se vio reflejada en ciertas operaciones que normalmente se realizan en estos puntos, como los giros, que se redujeron en monto y en cantidad en 9,7% y 5%, respectivamente. Esto a su vez se tradujo en una disminución de las operaciones de cash-in y cash-out, que implican cargar el dinero al sistema o efectivizar el dinero recibido, en 0,1% y 7%.