El proyecto de ley que modifica y amplía la Ley N° 2640/2005 “Que crea la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD)” modernizará la institución y la dotará de nuevos roles y capacidades para promover con más fuerza el desarrollo de la generación de empleo, explicó la presidenta de la entidad, María Fernanda Carron. Mañana, el proyecto de ley será tratado en el Congreso Nacional, por lo que existe mucha expectativa sobre la situación.
La ejecutiva explicó que la propuesta no cambia el modelo básico de banca de segundo piso, que es la de canalizar sus recursos a través de bancos, financieras y cooperativas, sin captar depósitos del público ni prestar directamente a las personas y empresas. “Esto nos va a permitir actualizar luego de 15 años la carta orgánica de nuestra institución y nos va a permitir ser más efectivos en la diversificación de la captación de recursos”, explicó la titular de la AFD.
Por su parte, Fernando Paciello, del Banco Basa, señaló que sería muy importante que los senadores aprueben el proyecto, ya que fue larga y profundamente debatido, inclusive con apoyo externo de consultores internacionales. “También, y muy importante, es que la capacidad prestable a las instituciones financieras se ampliaría y con ello la posibilidad de brindar más recursos a nuestros clientes”, afirmó Paciello.
OBJETIVOS PRINCIPALES
Los nuevos roles de la AFD serían participar en diferentes negocios fiduciarios, diseñar y estructurar proyectos de inversiones para APP.
También podrá financiar obras de infraestructura de gobiernos subnacionales y empresas públicas.
Entre las nuevas capacidades podrá contratar préstamos y emitir bonos, con o sin garantía del Estado, hasta los montos autorizados por el Presupuesto General de la Nación (PGN); se podrán celebrar contratos y emisiones de títulos de deudas en los mercados internacionales y se podrán ampliar sus inversiones en tesorería en nuevos instrumentos financieros.
Dentro de la mejora de la gobernanza se pretende brindar mayor independencia en el manejo de sus recursos humanos y separar las figuras del presidente y gerente general; además, precisar el privilegio de la cartera de créditos de la AFD otorgados a las IFI (instituciones financieras intermedias), entre otros aspectos.