El tipo de cambio continúa su fluctuación en niveles de G. 6.400. Tanto la oferta como la demanda se estabilizaron y se observa cierto confort por parte del Banco Central del Paraguay (BCP) con el rango de precio actual del tipo de cambio. Los distintos importadores y multinacionales siguen observando un dólar débil en Paraguay, por lo que apuran demandas; por otro lado, los exportadores liquidan sus partidas tratando de evitar una mayor apreciación del guaraní, señala el comentario semanal de Basa Capital.
“El BCP no está interviniendo diariamente el mercado como de costumbre. Ubicamos soportes en G. 6.200 y G. 6.100; mientras que las resistencias o techos en 6.500 y 6.700 para el corto plazo”, menciona el análisis. Los datos estadísticos muestran cómo el guaraní sigue siendo la moneda más fortalecida con relación el real, peso argentino y peso uruguayo. La cotización en el mercado minorista cerró la semana en G. 6.400, luego de incluso caer a G. 6.300 en días previos. En tanto, en el mercado mayorista, el dólar de referencia se situó en G. 6.391,27, según publicó el Banco Central.
A principios de este año, el 4 de enero del 2021 (primer día hábil), la moneda estadounidense se cotizó a G. 6.923 la unidad en el mayorista, observándose así una pérdida en el valor de G. 485. El mercado minorista o casa de cambios también muestra un comportamiento similar. En este sector, el dólar arrancó este año con un precio de G. 6.850 a la compra y G. 6.950 a la venta, mientras que en la fecha el billete verde se posicionó en el mercado al menudeo a G. 6.250 a la compra y G. 6.400 a la venta, con reducciones de G. 600 y G. 550, respectivamente. Este comportamiento obedece principalmente al volumen de divisas que va ingresando al país mediante las exportaciones, principalmente a través de los envíos de soja en estado natural y sus derivados. A esto se suman las intervenciones realizadas por el BCP en el precio de la moneda norteamericana mediante la venta de dólares al sistema financiero local.
El dólar en el mundo descendió el viernes a un mínimo de cuatro semanas, golpeado por una fuerte caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro de EEUU en la sesión previa, debido a que los inversores están creyendo cada vez más que la Reserva Federal mantendrá una política monetaria expansiva por más tiempo. El retorno de la deuda a 10 años del Tesoro tocó un mínimo de un mes de 1,528%, alejándose aún más del 1,776% que marcó en marzo, su mayor nivel en más de un año, incluso a pesar de que el jueves se conocieron datos de ventas minoristas y empleo mejores que lo esperado.