Las perspectivas para este año son las mejores, con una previsión de crecimiento económico del 4% y el cumplimiento de las medidas sanitarias será clave para que estas proyecciones se concreten, afirmó el ministro de Hacienda, Óscar Llamosas.
El titular de Hacienda aseguró que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) por octavo mes consecutivo presenta números positivos, lo que indica una reactivación del consumo. Dijo que debe aprovecharse esta coyuntura especial para nuevamente reforzar la idea de que se debe avanzar en las reformas públicas, como la del servicio civil, compras públicas y superintendencia de pensiones.
Señaló que hay una serie de acciones que se tiene que hacer ahora si se quieren sostener los niveles de crecimiento económico que se tuvieron antes de la pandemia.
Por otra parte, mencionó a las vacunas para el covid- 19 y precisó que hasta el momento se hizo un adelanto de 7 millones de dólares en el marco del mecanismo Covax y de 10 millones de dólares para las vacunas rusas, según publicó el portal IP.
Puntualizó, en ese sentido, que está en gestión otro tipo de alternativas que seguro requerirá también de algún tipo de anticipo. “Dentro del PGN se tienen previstos unos 40 millones de dólares a ser destinados a las vacunas”, mencionó.
Explicó que la inversión pública es un pilar muy importante para la generación de empleos y recordó que el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) llegó el año pasado a una ejecución récord superior a los 1.000 millones de dólares.
Asimismo, concluyó señalando, en el programa “El péndulo”, por Unicanal, que el déficit fiscal cerró en 6% el año pasado y la deuda en torno al 34% del producto interno bruto (PIB), explicado íntegramente por los recursos asignados a la atención de la emergencia y la recuperación económica.
INCERTIDUMBRE NO ES SALUDABLE
Las situaciones de incertidumbre que rodean a todo problema político no son saludables para la perspectiva económica, señaló el economista, ex presidente del Banco Central del Paraguay, Carlos Fernández Valdovinos. “Lo peor que hay para la economía es la situación de incerteza. Una mayor tranquilidad política va a ayudar a que se cumplan los pronósticos, lógicamente si todo esto se posterga, si sigue la incerteza política, va a terminar finalmente afectando (al producto interno bruto) quiérase o no”, dijo.
La crisis política deja siempre sus secuelas en la economía. Las manifestaciones de la ciudadanía son legítimas en cuanto a las exigencias que plantean al Gobierno. Pero que, al ser consecuencia de una crisis de gestión, ello necesariamente tendrá incidencias en el campo de la economía, explicó.