La industria porcina celebra el nuevo mercado ganado, Uruguay, pero ahora se debe apuntar a lograr que la República de China (Taiwán) habilite el ingreso de la carne a este importante destino. Es lo que señaló a este medio el presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), José Carlos Martin Camperchioli, ante la consulta sobre los avances y nuevas proyecciones para el sector, tras el primer embarque de 25 toneladas de carne de cerdo, que enviaron este jueves último al país charrúa.
“Lo de Uruguay es un logro, pero ahora el desafío es que Taiwán ya habilite este año el ingreso de carne de cerdo paraguaya, algo que venimos trabajando desde el 2019. A finales del año pasado liberaron los cupos arancelarios, pero falta que habilite al país y esperamos que se de en el menor tiempo”, expresó Martin.
Esto, teniendo en cuenta que el mercado taiwanés será un importante eslabón para el desarrollo del sector, por lo que se viene peleando desde hace 18 meses señaló el presidente, al tiempo de acotar que la habilitación de Uruguay no tardó ni 10 meses, estando incluso en pandemia.
En cuanto al avance del proceso, mencionó que Taiwán se comprometió en enviar una auditoría luego del año nuevo chino, para lo cual se están preparando desde Senacsa con el desarrollo de un sistema disruptivo que mejorará los procesos de gestión sanitaria, con informaciones en tiempo real.
APOYO DE LA UE
Este progreso será posible tras una importante inversión realizada por parte de la Unión Europea UE) de US$ 200 mil, por lo que aseguró que la institución respalda el compromiso de apoyar al sector, y a estandarizar los procesos para el mercado internacional.
Martin destacó, además, el gran potencial del complejo porcino nacional, calificándolo como infinito, ya que el mercado interno no consume ni el 5% de lo que se produce, sostuvo.
La expectativa para el mercado uruguayo es de seguir aumentando el volumen, ya que es un mercado de US$ 100 millones que importa al menos 35.000 toneladas, lo cual se irá ampliando luego de los primeros tres o cuatro meses de abastecimiento, precisó.