Durante la crisis, el gasto en el comercio electrónico aumentó del 10 al 16%, aproximadamente, en su punto máximo, en comparación con sus niveles antes de la crisis. Si bien la adopción del comercio electrónico en América Latina y el Caribe es baja en comparación con otras regiones, se espera que entre el 20% y el 30% del aumento del comercio electrónico relacionado con COVID sea permanente en cuanto a su participación en el gasto minorista general, señala el reporte de Mastercard Economics Institute, denominado “Economía 2021”.
Es probable que la adopción por parte de generaciones mayores, la conveniencia adicional y los menores costos para los consumidores hagan que la demanda por lo digital se mantenga en el 2021. En ese sentido, resalta Mastercard Economics Institute que más actores debutan en los mercados del comercio electrónico. “A medida que los gigantes del comercio electrónico intentan penetrar en el mercado, calculamos que alrededor del 20% y 30% del máximo alcanzado en el cambio al comercio electrónico relacionado con el covid se mantendrá”, enfatizan.
La adopción de servicios financieros ofrecidos a través de los canales en línea y otros servicios digitales aumentará su popularidad entre los grupos demográficos de menores ingresos, lo que probablemente se mantendrá hasta bien entrado el 2021.
Con el propósito de ayudar a los gobiernos y las empresas a seguir adelante en el camino de la recuperación tras los desafíos del 2020, Mastercard lanza su reporte para ofrecer un panorama de lo que acontecerá en las economías alrededor del mundo y en América Latina. El estudio fue realizado con el propósito de analizar las tendencias de mayor relevancia a nivel global desde el enfoque del consumidor, ofreciendo información sobre asuntos económicos para clientes, socios y miembros del sector público.
Equipos de científicos de datos y economistas evaluaron los indicadores económicos clave, junto con un análisis de la actividad de ventas agregadas y anónimas de la red global de Mastercard para brindar información global y regional sobre el gasto del consumidor, el comercio electrónico atado a la aceleración digital, así como también viajes y políticas económicas y de riesgo.
LOS IMPACTOS EN LAS REMESAS
Un doble impacto por la desaceleración del turismo internacional y una caída en los flujos de remesas afectarán el crecimiento; sobre todo para muchas de las pequeñas economías de la región posicionadas en el exterior.
A medida que el mundo redirige a los turistas internacionales a destinos más locales, Centroamérica y el Caribe estarán muy expuestos a la caída del turismo internacional porque, históricamente, han tenido las mayores tasas de turismo en la región. A su vez, las restricciones globales laborales impactarán a los trabajadores en el extranjero y las remesas que envían a sus casas.
Específicamente, habrá reducciones de las remesas de trabajadores y familias en el exterior, que llegaron del 1.5 al 3% del PIB total. En el Caribe, el impacto es de doble dígito, señala Mastercard.