Ciudad del Este. Agencia regional.
“Somos uno de los sectores más golpeados y no vemos una situación alentadora a corto ni mediano plazo, el futuro no es alentador por la situación de la pandemia y por los datos que pasan los médicos”, analiza Mariano Quiñónez, gerente del Hotel Howard Johnson de Ciudad del Este, consultado por La Nación sobre la situación del rubro hotelero.
“Como ya todos saben, fue un año bastante difícil en términos de ocupación, comenzamos el año con muy buena perspectiva de lo que iba a ser el 2020, pero en marzo empezaron a cancelarse las reservas por la situación ya conocida de la pandemia del coronavirus. Contábamos con una Semana Santa con total ocupación y las reservas se cayeron todas, situación que nos obligó a cerrar por un mes porque no había clientes”, explicó el gerente de una de las marcas referentes en Alto Paraná en el sector.
En mayo fue cerrado el hotel y en junio se reabrió con un mínimo de 5 a 10% de ocupación. El hotel dispone de 84 habitaciones, de las cuales habilitaron dos pisos con unas 20 habitaciones. “Fueron tiempos muy difíciles”, remarcó Quiñónez. Mencionó que el repunte empezó en setiembre llegando a un máximo del 25% de ocupación, pero este diciembre estuvo en 15%, a causa de las medidas del Gobierno que hicieron caer varias reservas. “Eso de no poder viajar, luego que sí se puede, que los 100 kilómetros, nos hizo sufrir varias cancelaciones”, manifestó Mariano Quiñónez. De las 84 habitaciones que dispone el hotel, cuando se reactivó habilitaron 40 y de esa cantidad, solo el 15% está ocupado.
AJUSTE DE SERVICIOS
“Fue caótica, tuvimos que reinventarnos, incluso modificar y ajustar algunos servicios. Cerramos de marzo a junio. Mantuvimos un 50% a nivel operativo, pero solo con un 30% de ocupación que, actualmente es del 40%”, dijo por su parte Benjamín Achucarro, gerente del Hotel Asunción, uno de los antiguos de Ciudad del Este y ubicado fuera del centro. En cuanto a la proyección para el nuevo año, dijo que es llegar por lo menos al 50% de los espacios utilizados, pero que eso depende totalmente de las restricciones del Gobierno y del apoyo en cuanto a la seguridad de los pasajeros.
Carlos Jara, del Hotel Convair, del microcentro de Ciudad del Este, dijo que el año termina con un ligero repunte desde que se levantó la cuarentena y se abrió el Puente de la Amistad. Este mes tienen entre el 20 y 25% de ocupación de las 75 habitaciones que dispone. “Estamos empezando a tener una luz de esperanza por lo menos. La pandemia y el mal manejo de algunas cosas tuvieron un impacto significativo en la industria hotelera, en julio, agosto, setiembre, no tuvimos prácticamente nada de gente, solamente una o dos habitaciones ocupadas”, sostuvo el directivo hotelero y remarcó que fue un sector muy golpeado.
PROGRAMA HOTEL SALUD
La Secretaría Nacional de Turismo, con el apoyo del Ministerio de Salud Pública, implementó el programa Hotel Salud para recibir a aquellos ciudadanos procedentes del extranjero para hacer la cuarentena obligatoria, siempre y cuando puedan pagar. Carlos Jara, del Convair, indicó que “el programa Hotel Salud ayudó, nos dio un oxígeno, un pequeño respiro para que no cerremos el hotel”.
“La permanencia de las personas era de quince días y eso era un número importante para nosotros, sobre todo para los que no teníamos gente”, manifestó el directivo hotelero. No obstante, Jara dejó en claro que el programa “fue bueno unos tres meses porque después empezó a degenerarse, por los enormes problemas que había”, expresó.
Jara explicó que “la existencia de un protocolo enorme para que la gente llegue a los hoteles salud, para después, ya al final, cualquiera sea de esa categoría, entonces la gente se fue diluyendo en varios lugares”.
El Howard Johnson no aceptó ser parte del programa Hotel Salud. “La evaluación que se realizó con la directiva vio que no compensaba porque al principio hubo mucha promesa del Gobierno en cuanto a ayuda que al final no se dio, teníamos que responder a todos los costos y tener tarifas bastante accesibles”, refirió el gerente Mariano Quiñónez.
PERSPECTIVA
Carlos Jara refiere que recién cuando se realice la vacunación masiva contra el coronavirus se podrá creer en una reactivación económica real, siempre y cuando se apliquen las medidas correctas. Habló de la necesidad de que la economía sea reactivada en serio porque lo que este año se hizo fue para sobrevivir.
Sigue la pandemia, de nuevo será un año sumamente difícil para el Paraguay, para la mayoría, lo que pasa es que los números macro del país se mantienen más o menos, porque hay rubros muy importantes para el país, como la soja, la carne y otros, pero una cantidad importante de la población seguirá sintiendo los efectos como son las mipymes, los negocios pequeños y los informales, según Carlos Jara.
Aclara que, al haber menos consumo, el sector hotelero también se restringe porque la gente sale menos. “Aprendimos las empresas hoteleras que no volverá a ser lo mismo en cuanto a cantidad de gente a quienes les damos trabajo. Hotel Convair tenía 35 funcionarios y tuvimos que despedir a 25 personas”.