Con el objetivo de convertirse a largo plazo en la compañía cervecera más ecológica del mundo, en marzo pasado la planta industrial de Zoeterwoude, en Holanda, inició la producción de la Cerveza Sol utilizando 100% energía renovable procedente de la energía solar. Siguiendo la línea global de la marca, en Paraguay se instaló el primer vallado del país que se nutre de energía solar. Este está ubicado sobre la avenida Aviadores del Chaco.
Este es solo uno de los primeros pasos de la marca en el país hacia la construcción de un entorno más sustentable y un símbolo del compromiso con el cuidado del medioambiente. Se asumen así los retos que supone la transición energética, luchando contra el cambio climático mediante el uso de una energía limpia y no contaminante.
Para el proceso de producción, se necesitan aproximadamente 1.980 MWh/año de energía, para lo cual Sol instaló 9.750 paneles solares en su fábrica de Holanda.
A pesar de la gran cantidad de energía que necesita la fábrica para su funcionamiento, la misma sigue produciendo mayor cantidad de energía de la que utiliza en el proceso de fabricación y embotellamiento. En este caso, si la electricidad producida no es necesaria en la cervecería, la misma se transfiere a la red eléctrica pública, un equivalente para iluminar más de 300 hogares durante un mes.