“El mercado laboral ya estaba cambiando rápidamente antes de la pandemia, y la crisis está acelerando esos cambios. Para aprovecharlos, se recomienda: expandir la infraestructura digital, invertir en capital humano y mejorar los programas de protección social”, señaló Guillermo Beylis, economista e investigador en oficinas del Economista Jefe del Banco Mundial.
Fue tras la presentación de la investigación “Efecto viral: covid-19 y la transformación acelerada del empleo en América Latina y el Caribe”, en jornadas económicas del Instituto del Banco Central del Paraguay (IBCP).
“Hemos observado un cambio importante en la demanda laboral, desde una reducción de los trabajos con tareas rutinarias hacia un aumento de los trabajos analíticos”, agregó. Mencionó que, al preguntar las razones de este cambio, se encontraron tres causas principales: la desindustrialización, la servicificación y la adopción de nuevas tecnologías.
Si bien se observa que el sector industrial disminuye al tiempo que el sector servicios aumenta con el nivel de desarrollo de los países, en América Latina observamos una “desindustrialización prematura”, mencionó Beylis. Esta desindustrialización prematura tendría efectos negativos en la productividad total de la economía; no obstante, los resultados son heterogéneos entre países.
El segundo fenómeno es la servicificación de la economía: las empresas ofrecen y demandan más servicios. Se observa que a mayor nivel de ingreso, todos los sectores económicos emplean más ocupaciones de servicios y menos de producción de bienes, de acuerdo al reporte presentado por el economista.
El tercer fenómeno es la adopción de nuevas tecnologías y la automatización de tareas. Esta situación reemplaza los empleos disponibles, es decir, se pierden algunos mientras se generan otros nuevos. El experto obtuvo un PhD en Economía de la UCLA en el 2013. Actualmente, su análisis se centra en el impacto de los diferentes niveles educativos en los mercados laborales y sus efectos sobre la pobreza y la desigualdad.