La BBC Mundo destacó en un artículo sobre el coronavirus en Amé­rica Latina, que Paraguay será uno de los países que tendrán las caídas menos profundas este año, al igual que Guate­mala y Uruguay. En este esce­nario, los países de la región que prevén las caídas más brutales de actividad econó­mica serán Argentina, Brasil y Perú. Aunque los efectos de la pandemia y las cuarentenas son un golpe brutal a las eco­nomías, también es cierto que a la caída contribuyen otros factores que ya estaban pre­sentes antes de que el covid- 19 se expandiera por la región dejando miles de contagiados y muertos.

En un apartado exclusivo, el artículo señala que en los dos primeros meses del año, Paraguay tuvo un creci­miento bastante alto debido a la cosecha de la soja, un producto que tiene un peso importante en su economía. Es por eso que la llegada de la pandemia encontró al país en una relativa buena posición, enfatiza BBC. “A eso se suma que Paraguay ha logrado un mayor control de la pande­mia que otros países y eso le permitió comenzar a flexibi­lizar el confinamiento a par­tir de mayo. Ahora están en una etapa de regreso gradual a las actividades, con mayor apertura de la actividad eco­nómica y con la pandemia, al menos hasta ahora, bajo con­trol”, menciona el artículo.

A nivel latinoamericano, la brutal caída de la acti­vidad económica, le dice a BBC Mundo, Daniel Titel­man, director de la División de Desarrollo Económico de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), refleja que la crisis global fue mucho más fuerte de lo que se esperaba hace unos meses y que las medidas de confina­miento tuvieron que exten­derse por más tiempo, ya que Latinoamérica se convirtió en el centro de la pandemia. “La región va a tener la peor con­tracción de los últimos 100 años, con gigantescos aumen­tos de desempleo, pobreza y desigualdad de ingresos. Hacia el futuro, se espera una recuperación lenta para Amé­rica Latina, que puede tomar varios años”, agrega.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

El crecimiento y los niveles de inversión podrían recu­perarse hacia fines del 2022, pero “si miramos la historia, la recuperación de la pobreza será mucho más lenta”. Con la idea de echar a andar los motores lo antes posible, exis­ten presiones en la región para que los países reabran sus eco­nomías, explica Titelman.

Déjanos tus comentarios en Voiz