El desembolso para el desarrollo de este tipo de obra es superior a la construcción convencional, pero luego de 3 años ya genera un ahorro muy importante, afirman.
- POR ORLANDO BAREIRO
Las construcciones sostenibles son proyectos inmobiliarios amigables con el medio ambiente, que tienen como principal virtud reducir el impacto negativo sobre la naturaleza que producen construcciones convencionales, y que además se vuelven más conveniente a largo plazo.
De acuerdo con lo que explicaron desde el Consejo Paraguayo de Construcción Sostenible, invertir en un proyecto sostenible representa una inversión superior entre 3% y 5%, si se compara con una estructura convencional; sin embargo, el inversionista puede compensar esa diferencia en tres años, ya que permite, por ejemplo, el ahorro de la electricidad y del agua.
A nivel local las inversiones de este tipo todavía son muy escasas, es más, solamente se tienen contabilizados 6 proyectos que cumplen con la certificación internacional, y otros 10 están en proceso.
“La situación de lo que es la construcción sostenible en el Paraguay cambió muchísimo de los primeros emprendimientos que datan del 2008. En ese entonces, los pocos profesionales que sabían sobre esto era porque hicieron cursos en el extranjero; sin embargo, ahora tenemos un montón de profesionales capaces de asesorar en este tipo de construcción”, indicó la ingeniera Gabriela Mesquita, especialista en este rubro y que además forma parte de varias organizaciones del segmento.
Agregó además que desde el Consejo Paraguayo de Construcción Sostenible capacitan a distintos grupos de profesionales en diversas especialidades como arquitectura, ingeniería civil, ingeniería ambiental, ingeniería para los proyectos de iluminación, ingeniería sanitaria, ingeniería en climatización y ventilación. “Estos ya están capacitados para poder capacitar, incluso ya le están ofreciendo a sus clientes la posibilidad de construir sostenible”, expresó la profesional.
Con respecto a la mayor rentabilidad a largo plazo, ejemplificó que muchas veces las construcciones convencionales no utilizan buenas aislaciones térmicas; entonces, las paredes son muy finas y captan mucho calor. “Lo que hace una construcción sostenible es darle un uso más inteligente a los proyectos, en este caso, por ejemplo, con materiales que hacen que se utilice menos el aire acondicionado y se ahorra todo el año”, señaló.
A nivel local, además, existen proyectos muy importantes, como por ejemplo la maquiladora Blue Design, que exporta vaqueros a EEUU, Brasil y Argentina, realizó una fuerte inversión de US$ 8 millones en el 2013, con la habilitación de una planta con características “verdes” en San Lorenzo.
La planta de Blue Design es la primera en obtener esta certificación en el territorio local, y además, es la primera industria textil en América en recibir tamaño galardón.
“Como parte de su estrategia de trabajo utiliza mucha agua para todo lo que es lavado y prelavado de los jeans, entonces, como es lo que más puede afectar el medio ambiente, tiene una planta de tratamiento de efluentes que permite reutilizar el agua dentro de la compañía”, informó Mesquita.
Otro de los edificios sostenibles es por ejemplo el de Mapfre, que cuenta con unos tanques para almacenar agua que aprovecha de los enormes problemas de las inundaciones para reutilizarla.
El hotel Holiday Inn es otro de los emprendimientos sostenibles, la empresa cuenta con paneles solares con capacidad para la generación de agua caliente, ya que tiene 116 baños.
Por su parte, el arquitecto Horacio Cherniavsky también dio su postura con relación a esta modalidad. “No tiene que ver con una moda que está siendo importada, o una tendencia a la que hay que adaptarse, sino que tiene que ver con el sentido común de las prácticas profesionales que aplican la lógica y las consideraciones pertinentes para que las intervenciones arquitectónicas sean las más apropiadas y armónicas con el entorno”, remarcó el arquitecto.
Asimismo, Alexander Giaever, presidente del Consejo Paraguayo de la Construcción Sostenible, afirmó que a nivel local se necesita comprometer a las personas, empresas y gobiernos para que sigan ampliando el mensaje de la sostenibilidad.
“La mayoría de las personas no exige una construcción sostenible, piensa primeramente en lo más económico, en un resultado inmediato. Pero a la larga, una construcción ecológica que a veces dura más que la vida de una persona, se debe de pensar a largo plazo”, aseveró Giaever.
CONSEJO
El Consejo Paraguayo de la Construcción Sostenible es una organización sin fines de lucro que promueve la construcción sostenible, facilitando la utilización de técnicas y herramientas disponibles para el desarrollo de los proyectos.Es miembro de una red global de consejos sostenibles: World Green Building Council, que es la unión de los Consejos de Edificaciones Sostenibles. Es la organización internacional más grande con influencia en el mercado de la construcción sostenible.
Fue fundado en noviembre del 2012 como entidad sin fines de lucro. Los valores de la organización son integración, transparencia y cooperación entre profesionales e interinstitucionales.
MÁS APOYO DEL GOBIERNO
La ingeniera Gabriela Mesquita, socia fundadora del Consejo Paraguayo de la Construcción Sostenible, instó al Gobierno a fomentar más la implementación de este tipo de construcciones. “El rol del Estado es importantísimo; hay países con regulaciones superfuertes con respecto a la sostenibilidad. Por ejemplo, en San Pablo, el municipio determinó que todos los emprendimientos tienen que hacerse cargo del 100% del agua que cae en sus lotes para no tirar agua en la calle”, expresó Mesquita.
Explicó también que las normas locales son voluntarias. Agregó que el Gobierno puede analizar la posibilidad de construir oficinas públicas de este tipo.