Claramente Paraguay dejó de ser la econo­mía “estrella” de la región en un corto periodo de tiempo, pues al inicio de año todos indicaban que el país tendría un fuerte cre­cimiento económico para este año. Hoy todos apun­tan que la economía para­guaya será lastrada, junto a la Argentina, hacia un resultado negativo en su Producto Interno Bruto. Pero, la consultora inter­nacional FocusEconomics todavía mantiene una leve esperanza, ya que aún estima un leve crecimiento local positivo.

De acuerdo a su análisis, se espera que el crecimiento se acelere el próximo año después de perder impulso en este 2019. Se prevé que la demanda interna se forta­lezca con la expansión más rápida del consumo privado y la inversión fija en medio de la mejora del sentimiento económico.

Mientras tanto, se prevé que las exportaciones repun­ten el próximo año, ya que se espera que las condicio­nes difíciles disminuyan en Argentina y Brasil, que son los socios comerciales clave de Paraguay.

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En ese sentido, los panelistas de FocusEconomics esperan un crecimiento de 1,3% en el 2019 y 3,3% en el 2020, que es 0,3 puntos porcentuales menos que la estimación del mes pasado. “Los panelistas siguen teniendo en cuenta la contracción del PIB del segundo trimestre en sus estimaciones”, alega.

La economía se contrajo más bruscamente en el segundo trimestre, con un descenso del PIB del 3,0% en términos interanuales tras la caída del 2,1% del primer trimes­tre. La inversión fija lideró la disminución, cayendo a una tasa notablemente más rápida en el segundo trimes­tre que en el primer trimestre, mientras que los inventarios hicieron una contribución negativa, argumenta la con­sultora. En el lado positivo, el consumo privado se recu­peró ligeramente en medio de un ligero repunte en los préstamos bancarios, y el gasto público se aceleró en el trimestre a medida que el gobierno aprovecha las condi­ciones monetarias acomoda­ticias para impulsar la inver­sión en infraestructura.

En cuanto al 3er trimestre, un repunte de la actividad económica general en julio proporcionó cierto respiro, aunque una caída continua en el crecimiento del crédito y una contribución negativa del sector externo justifica la cautela, finaliza el reporte mensual elaborado por eco­nomistas internacionales.

AMÉRICA LATINA CONTINÚA TENDENCIA

La perspectiva de crecimiento de América Latina se redujo nuevamente este mes, conti­nuando la tendencia observada en los últimos seis meses. Los vientos en contra de las tensio­nes comerciales y los factores específicos del país se ven retrasados en la actividad. Parti­cularmente, se ve a Argentina atrapada en una profunda recesión en medio de una crisis de confianza, mientras que la consolidación fiscal, la incertidumbre política y el bajo sentimiento pesan sobre varias economías.

Las monedas se mantuvieron en general estables en las últimas semanas, luego de depreciarse notablemente en agosto en medio del colapso del peso argentino y el aversión al riesgo de los inversores, menciona el reporte de FocusEconomics.

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