“A veces escuchamos que la macro no llega a la micro. Los datos refutan claramente la tesis. En Paraguay, la deceleración (recesión) económica se tradujo en un aumento del desempleo y subempleo; disminución de los ingresos en las familias; y, finalmente, caída del consumo”, manifestó el economista y ex presidente del Banco Central del Paraguay (BCP) Carlos Fernández Valdovinos.
De acuerdo a los datos oficiales, los indicadores muestran datos negativos al cierre del segundo trimestre del 2019. Por ejemplo, el crecimiento económico anual en mayo fue de -1,0%, mientras que la recaudación de impuestos en términos reales, entre enero y julio, también fue de -2,4%.
En cuanto al desempleo, en el segundo trimestre este aumentó 1,5%, lo que se traduce en un alcance de 57.000 nuevas personas, mientras que el subempleo, en el mismo período, creció 2,5%, que alcanzó a 91.000 nuevas personas.
En cuanto a la situación política actual y su impacto en la economía, mencionó que toda volatilidad tiene sus efectos sobre la economía, pero resulta muy difícil medir. Sin embargo, aclaró que afecta indistintamente.
“Es solo ver lo que pasó con lo de Argaña, Fernando Lugo e inclusive la semana pasada”, dijo. Fernández enfatizó que los efectos no solo son de corto plazo, como la suba coyuntural del dólar, sino que tiene sus efectos de mediano plazo, ya que los agentes esperan que se reacomoden de nuevo las cosas para invertir o consumir. Y va más allá, afuera hay que empezar a explicar de nuevo qué pasó en la parte política a los inversionistas de nuestros bonos y a las calificadoras de riesgo, agregó.
“Vi que mucha gente pregunta quién gana con el juicio político o sin el juicio. No creo que nadie gane en una coyuntura política volátil. Por el contrario, perdemos todos”, aclaró.
Semanas atrás, economistas también afirmaban que Paraguay no estaba preparado para soportar una crisis política, por su impacto en la economía. La situación de crisis persiste a solo una semana de que el Poder Ejecutivo cumpla un año de gobierno.
INDICADORES CONTINÚAN DÉBILES
La economía paraguaya es azotada por un fuerte viento, a raíz de una crisis política, que empeora aún más el escenario para finales del 2019. Sumado a esto que, en cuanto al sector real, los indicadores de corto plazo revelan que el desempeño económico se mantiene débil, tanto por el lado de la actividad como de la demanda, según adelantó el Banco Central del Paraguay (BCP), en un comunicado.
Asegura que los indicadores de actividad económica y de demanda se mantienen por debajo de los niveles del 2018. El Comité Ejecutivo de Operaciones de Mercado Abierto (Ceoma) considera que existe un espacio para dotar a la economía de un impulso monetario, que es compatible con la convergencia de la inflación proyectada a la meta de 4% anual en el horizonte relevante de proyección.