El viceministro de Trabajo, Luis Orué, del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS), en contacto ayer con la 1080 AM explicó la situación de suspensión de actividades solicitadas desde octubre del 2018, unas 16, y en lo que va del año otras 3 empresas más, que repercutirá en más de 4.000 empleos que serán afectados, ya que 3.200 de forma directa y otros 1.200 de forma indirecta.
Indicó que la figura de suspensión de contrato de trabajo está establecida en el Código Laboral en el capítulo 8, Artículo 71, ya sea de forma parcial o total por algún tipo de dificultad. “Eso significa que los trabajadores van a dejar de percibir sus salarios durante esos periodos, si es que se autoriza la suspensión, ya que la ley establece ciertos requisitos y uno de ellos es que el Ministerio debe fiscalizar a las empresas para conversar con los trabajadores, y el código habla que estos deberán estar conformes y notificados con anticipación”, expresó.
Es así, y conforme ya lo había anunciado Orué días atrás a este medio, en el día de ayer se hicieron presente en las instalaciones de la fábrica de Manufactura de Pilar, el director de Fiscalización acompañado de un equipo de fiscalizadores, y que al parecer, según la central sindical, no tendrían inconvenientes porque los mismos trabajadores están en conocimiento de la situación de la fábrica.
Mientras que el secretario del sindicato de trabajadores de Manufactura de Pilar, Eumelio Núñez, el domingo último señaló a La Nación que están desconcertados con la situación, y que deberán recurrir a un asesoramiento legal, incluso a solicitar una audiencia con el presidente de la República, y hasta la tarde de ayer, no estaba al tanto de la visita de fiscalizadores a la fábrica.
Entre los pedidos de suspensión, la mayoría temporal aclaró Orué, mencionó otros casos como el de Manufactura de Itauguá, que ya reanudó sus actividades, otra del rubro agrícola por periodo de zafra, una maquiladora de Ciudad del Este con más de 1.000 obreros y Sumidenso, la mayoría por inconvenientes con su principal mercado, Brasil.
“En la región hay una brisa en contra”
El presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Luis Villasanti, dio su postura en cuanto a la suspensión de actividades solicitada por Manufactura de Pilar, y en cuanto a las medidas que estaría tomando el equipo económico el día de hoy, señaló que no estaba al tanto aún de lo que podría determinar, pues deberían primero estudiar para luego opinar con fundamentos, pero afirmó que “es evidente que en América del Sur hay una brisa en contra luego de varios años de tenerla a favor”, quizás de unos 6 a 7 años, dijo.
Por ende, es urgente que se llegue a una determinación para trabajar mejor. Algunos de los aspectos que consideran a tener en cuenta desde el Gobierno, es que no se deben aumentar los impuestos, quizás sí las bases tributarias porque de lo contrario se estaría castigando más al país. Hasta China Continental está bajando sus impuestos para atraer mayores inversionistas, resaltó.