El Servicio Federal de Vigilancia Veterinaria y Fitosanitaria de Rusia resolvió someter a procesos de controles de laboratorio a siete plantas frigoríficas nacionales en su carácter de exportadores de carne bovina, despojos cárnicos y carne porcina. La medida obedece a examinar los cargamentos para determinar la presencia de sustancias nocivas por encima de los límites permitidos.
Las plantas que están inmersas en esta medida pueden seguir exportando productos, pero los cargamentos deben ir acompañados por muestras para pruebas de laboratorio. Están en proceso de controles mejorados en Rusia Frigonorte, Neuland, Guaraní, Concepción y Frigochaco, para las exportaciones de carne bovina; Concepción MRA, para la exportación de despojos cárnicos; y UPISA, para la exportación de carne porcina, informó el servicio veterinario ruso. De las 17 plantas frigoríficas registradas para la exportación de carne bovina a Rusia están habilitadas actualmente unas 15. El mercado ruso tiene una estratégica importancia para el sector cárnico porque fue el principal mercado en el 2018, según estadísticas del servicio veterinario oficial.
ESTADÍSTICAS
En el 2018 las exportaciones de la proteína roja al mercado ruso generaron un ingreso de US$ 470,5 millones, que corresponde a un crecimiento del 79,2% en relación a los US$ 262,2 millones generados en el 2017, según el informe de comercio exterior del Banco Central del Paraguay (BCP).
El año pasado se embarcaron 142,2 mil toneladas de la proteína roja al mercado ruso, volumen que representa un aumento del 60,7% en comparación a las 88,5 mil toneladas exportadas entre enero y diciembre del 2017.
El mercado ruso fue el destacado en el año pasado por los índices de crecimiento en el volumen y valor de importación de carne bovina paraguaya. Además fue el destino en donde mayor apreciación registró la proteína roja nacional, de acuerdo a las estadísticas del BCP.