Armadores fluviales solicitan a la cancillería paraguaya decisiones más rigurosas conforme a la actual situación que se vive con la Prefectura Naval Argentina (PNA) por imponer el arribo de prácticos argentinos a buques con bandera paraguaya, que ante la negativa de los marinos terminó en la retención de una embarcación local.
El pedido insistente esta vez proviene del gerente comercial de la firma Naviship, Fernando González, de modo a solidarizarse con la Compañía Marítima Paraguaya SA (CMP), cuya embarcación está parada a la altura de Paraná, en la Argentina, desde este último domingo. Alegó que las decisiones tomadas por la Cancillería deben ser acompañadas de manera más seria por parte del Ejecutivo.
“Hace años se está tratando este tema sin resultados positivos. Ya es hora que se tome de una manera diferente tanto desde la Cancillería como de otras instituciones involucradas, porque lo que hace la Argentina es violar el tratado de libre navegación”, insistió.
Al efecto, representantes de la Cancillería nacional mantuvieron este lunes una reunión con sus pares de la Argentina, en la que se decidió conformar una comisión bilateral. Por su parte, el gerente general de CMP, Robert Bosch, lamentó una vez más lo sucedido, ya que pese a que se realizaron numerosas reuniones, hasta el momento no se obtuvo resultados positivos, y que las pérdidas se cuantifican cada vez más.
“Es una lástima, esto va a tardar y mientras, nuestro buque seguirá amarrado y sin poder cumplir con su propósito. Mientras se decide quienes conformarán la comisión, la empresa acumulará pérdidas por los sobrecostos que implica la situación”, sostuvo.