La historia de la cerveza en Paraguay es un viaje lleno de sabor y tradición, donde la llegada de los inmigrantes dejó una huella imborrable en la identidad nacional. Todo esto podrás conocerlo en el libro Cerveza en Paraguay, lanzado el miércoles en el Complejo Textilia. Se trata de una obra de Juan Alberto Migliore con diseño de Celeste Prieto.

Aunque hubo momentos duros, como el incendio de una fábrica o la triste decisión de un empresario de poner fin a su vida en su propia cervecería, esta historia brilla por la alegría y las fiestas en las que la cerveza siempre ha sido el alma de la reunión.

En el libro también se descubre que el gran futbolista Arsenio Erico, el Saltarín Rojo, tenía raíces italianas y cerveceras. También se podrá conocer más sobre un decreto del gobierno obligó a cambiar de nombre a una cervecería. Estas fábricas eran, además, el epicentro de reuniones llenas de vida, donde los fines de semana se degustaba chopp y se compartían deliciosas comidas.

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La presentación se realizó en el Complejo Textilia. Foto: Néstor Soto

Pedro Herken, en San Bernardino, comenzó esta costumbre sirviendo una fresca cerveza que él mismo elaboraba, mientras su esposa Catarina cocinaba platos típicos alemanes para los visitantes. A principios del siglo xx, era todo un acontecimiento viajar en vapor desde el Puerto de Asunción hasta la cervecería La Paraguaya en Sajonia, o en tranvía tirado por mulas hasta la fábrica de los hermanos Creydt en Tuyucuá. Eran días de celebración, ocasiones para disfrutar en familia y con amigos.

La cerveza en Paraguay no es solo una bebida; es un lazo que une a las personas, una herencia dorada con un rico acervo que ha conectado a generaciones y que seguirá fluyendo mientras haya memorias que compartir y amigos con quienes brindar.

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El libro es una obra de de Juan Alberto Migliore con diseño de Celeste Prieto. Foto: Néstor Soto

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