La Marcha Criolla se convirtió en una atracción instalada para la zona del Chaco, y los lugareños ya la esperan entusiasmados para ser parte de la competencia. Cada año está logrando más adeptos, tanto en cantidad de caballos participantes como propietarios, que van adquiriendo y desarrollando el caballo criollo para sus quehaceres del campo. La competencia es organizada por las ganaderas Sofía y Chajha, en el recinto de la Expo Rodeo Trébol
En esta quinta edición, que sumó récord en participantes, se destaca una amplia presencia femenina, de jóvenes amazonas que van ganando terreno en la competencia. Hay que recordar que, desde la primera edición en 2019, ya se contó con participación femenina, y justamente resultó como ganadora Ángela Schapansky, quien también se convirtió en bicampeona en la marcha del 2021.
En esta marcha participan 7 mujeres de los 19 jinetes que siguen en competencia. Quien también sorprendió con su talento con los caballos fue Ana Clara Maciel (17), la ganadora de la competencia del 2023, y este año vuelve a ser una de las candidatas, pues está confiada en que su caballo tiene las aptitudes.
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Por el segundo campeonato
“Si Dios permite vamos a llegar primero, como el año pasado, porque mi caballo está muy bien, no tuvo inconvenientes, ni rengueó, esto es porque está con buen estado físico y hoy llegamos 10 minutos antes”, expresó la joven jinete.
Sobre lo que representa para ella ser parte de la competencia y haber ganado la anterior edición, mencionó que es muy emocionante. Justamente el premio lo había dedicado al padre que estaba enfermo, y si vuelve a alzarse con el primer puesto, ya lo dedicará hasta el cielo, expresó con la voz torcida y entre lágrimas.
El entrenamiento del caballo que monta lo vienen trabajando desde hace un tiempo, entre las obligaciones del colegio ya que descuidar los estudios no está en sus planes, pues Ana Clara pretende ser doctora veterinaria, y tiene que sortear su tiempo libre para los entrenamientos.
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Motivadas por los padres
Otra de las jóvenes participantes es Meggan Evers, de tan solo 15 años, oriunda de Filadelfia, quien ya lleva su segunda competencia igualmente, motivada por la madre que le apoya en todo, así como la fortaleza de su caballo. “Llegamos a muy buen tiempo hoy, practicamos mucho para esta resistencia desde enero, pero nunca hicimos más de 20 km y acá se hace 40 km y está respondiendo muy bien, con mucha resistencia, buen ritmo porque no llegó a cansarse mucho”, indicó.
Así también en competencia se encuentra Yasmin Cristiny Montiel (16), de Loma Plata, quien realiza su primera marcha criolla, aunque ya estuvo motivada tras participar de la competencia para niños que se realizó en las ediciones anteriores de doma y lazo. “Mis padres me motivaron a participar en la marcha y la Estancia Santa Virginia que me prestó el caballo. Y es muy bueno esto, una sensación y una experiencia única, es mágico y con el incentivo de los amigos y mis padres es mucho mejor”, remarcó.