El Gobierno, a través del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), logró eliminar los atrasos con proveedores del Estado y fijó una fecha límite de ocho días para honrar sus compromisos, informó el viceministro de Administración Financiera, Óscar Lovera. La demora que se venía arrastrando de anteriores gestiones llegó incluso a darle el “mote de mal pagador” a la administración central, comentó el funcionario.
“Alrededor del 90 % de los ingresos de Fuente 10 están atados a gastos corrientes, a los grupos vulnerables, Tekoporã, y términos de ejecución, hay un desempeño superior, aunque está relación viene cayendo de lo realizado”, refirió Lovera, a la 1000 AM, entrando al terreno de la administración financiera actual del Estado.
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Recordó que la deuda que dejó la administración anterior a este gobierno, que era del 2,3 % del producto interno bruto (PIB), y que pudo contenerse mediante un esfuerzo interinstitucional con base en la transparencia. “El déficit del gobierno anterior fue sumamente perjudicial y todo bajo una deuda desconocida que se encontraba bajo la alfombra”, dijo. Los principales compromisos obligados ya honrados fueron el sector de la construcción y salud por más de USD 700 millones.
También hizo hincapié en que entre el 2020 y 2023 se vivieron escenarios complejos a raíz de la pandemia del coronavirus, donde los ingresos cayeron abruptamente, y que el proceso de normalización duró cuanto menos 2 años. “La pandemia cambió todo en lo económico”, indicó.
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Sobre la deuda pública, expuso que los niveles que se mantienen hoy “son prudenciales” y que el equipo económico está en constante reunión para saber gestionar esta realidad. Destacó también que en los próximos años se podrá contar con recursos adicionales de la central hidroeléctrica Itaipú por medio de la venta de energía eléctrica por 3 años.
Al margen, mencionó que la Ley de Hambre Cero pudo definir la necesidad que requiere alcanzar la universalización de la alimentación escolar con una fuente específica, que es el 80 % de los recursos que provienen por cesión de energía. “Con el Fondo Nacional para la Salud (del Fonacide), los recursos nunca alcanzaron. Lo que hizo el fondo fue exacerbar la inequidad”, reiteró.