Ante los exigentes requerimientos de trazabilidad para el ingreso de productos a la Unión Europea (UE), la Unión Industrial Paraguaya (UIP) compartió un comunicado respecto a la posición gremial, en el cual reconoce la necesidad país de adaptarse a las exigencias de mercados globales y demostrar el trabajo sostenible que ya se realiza.
“Los requerimientos europeos de trazabilidad y certificaciones de producción sostenible son fundamentales para el comercio futuro del Paraguay; es esencial estar preparados y disponer de la infraestructura necesaria, tanto pública como privada, para no quedar relegados en los mercados como productores marginales”, expresa el documento.
El gremio de industriales considera oportuna la conformación de un equipo interinstitucional del Gobierno Nacional (decreto 1541/2024), que pretende analizar los diversos aspectos de la normativa de la UE conocido como Reglamento 1115, de modo a disipar todas las dudas.
Se debe proveer herramientas
A la vez, instan a todos los sectores, tanto públicos como privados y a la sociedad civil, a acercarse unos a otros en el marco del diálogo constructivo, para contemplar los intereses generales del país, en la permanente búsqueda de ventajas y oportunidades para el desarrollo sostenible.
El documento señala que si bien ya se cuenta con normativas alineadas con muchos de los requisitos de la UE, las cuales son reconocidas y valoradas por las industrias, es imperativo a la vez proveer las herramientas necesarias al sector productivo, aseveran.
La UIP sugiere que los mecanismos de certificación deben estar disponibles para los que están dispuestos a adoptarlas, y a la par que sea una integración progresiva para aquellos que inicialmente opten por no adherirse. “El desarrollo del Paraguay no constituye un privilegio unisectorial, sino esfuerzo de todos los sectores de la economía”, remarca.
El Reglamento 1115 es una normativa diseñada por la Comisión de la Unión Europea, que regula el comercio de ciertas materias primas y derivados que provengan de territorios deforestados a partir de 2021, por lo que su objetivo es evitar el ingreso de estos productos en el mercado europeo, ya sean importados, comercializados o para exportación.