Ante las nuevas exigencias de mercados de los compradores, tales como la Unión Europea y su Reglamento 1115, el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) realizó una presentación de las normativas y el sistema de trazabilidad argentino de Visión Sectorial del Gran Chaco Argentino (Visec) a fin de buscar soluciones de fondo. La perspectiva de la institución apunta a estar insertados en el contexto mundial del comercio.
“La postura del ministerio siempre fue que Paraguay no puede aislarse del mundo y tiene que entrar de fondo en proyectos y programas que alienten al comercio”, sostuvo el titular de la cartera, Javier Giménez, en conferencia de prensa. Agregó que finalmente deben crearse ecosistemas de trazabilidad, pues estos siempre van avanzando.
Paraguay produce unas 10 millones de toneladas, de las cuales el 32 % es industrializada actualmente y de esto casi el 50 % se exporta a los países europeos representando 1,5 millones de toneladas que pasan por nuestras industrias. ”Del 63 % de la soja que se exporta en estado natural, prácticamente el 93 % se va a Argentina para ser trasbordada para completar el 1/3 de la harina de soja que va la Unión Europea”, precisó.
Giménez argumentó que por esta razón nuestro país necesitará ingresar indefectiblemente a estos sistemas que no solamente serán exigidos por el viejo continente, sino también por EE.UU., el Reino Unido y próximamente por China. “No podemos estar aislados en las exportaciones y no nos sirve decir que no a las imposiciones porque hay una realidad única que el mundo está exigiendo trazabilidad a raíz del calentamiento global”, apuntó.
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Aseguró que si bien existen diferencias fundamentales entre Paraguay y Argentina en la conformación de los registros son factores que irán ajustándose con el tiempo y negociando con la UE. La norma 1115 entrará en vigencia el 1 de enero de 2025 y regirá para todo productor que quiera exportar al bloque rigiendo para la carne, la soja, madera, los derivados.
Por su parte, Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de Argentina (CIARA), y del Centro de Exportadores de Cereales (CEC) relató la experiencia del vecino país, manifestando que cuatro años atrás se tenían cuestionamientos sobre la implementación en el gran Chaco, sin embargo se debieron adaptar al pedido del consumidor desarrollando la plataforma con adherencia voluntaria.