Pese a que en el entorno internacional se siguen registrando riesgos para la economía global derivados de las tensiones geopolíticas, desde el Banco Central del Paraguay (BCP) mencionaron que las condiciones económicas locales permiten seguir avanzando con la normalización de la Tasa de Política Monetaria (TPM).

El Comité de Política Monetaria (CPM), en su reunión de febrero, decidió por unanimidad realizar el sexto recorte de tasas ubicando la TPM en un nivel de 6,25. Con esta nueva reducción, el BCP mantiene la línea de convergencia y acerca la tasa de referencia a su nivel neutral, como lo esperado por el mercado.

En cuanto a los factores que impulsaron el recorte, en la minuta mencionaron que si bien persiste el riesgo en el ámbito internacional, las condiciones económicas locales permitieron seguir avanzando gradualmente hacia la normalización de la política monetaria. “Se destaca que, tras las últimas reuniones, la misma se encuentra en un nivel cercano al rango neutral”, añadieron.

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Indicaron que la actividad económica cerró el 2023 con una dinámica favorable y con perspectivas positivas para el 2024. En ese sentido, mencionaron que el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imaep) registró una variación interanual de 4,4 % en diciembre, cerrando el 2023 con un crecimiento acumulado de 5,0 %.

El resultado interanual se explicó por las incidencias positivas de electricidad y agua, manufactura y servicios, mientras que ganadería, construcción y agricultura atenuaron el crecimiento del indicador. Excluyendo la producción agrícola y la generación de energía eléctrica, el Imaep mostró un crecimiento interanual de 4,2 % (2,8 % en términos acumulados).

Por su parte, el Estimador de Cifras de Negocios (ENC) creció 8,8 % interanual, impulsado por las mayores ventas de insumos agropecuarios, dispositivos tecnológicos, combustibles, productos químico-farmacéuticos, equipamientos del hogar y prendas de vestir. En cuanto al Índice de Confianza del Consumidor (ICC), el mismo continuó en zona de optimismo, ubicándose en 59,1 en enero (57,5 en diciembre).

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Respecto a la inflación mensual de enero, consideraron que se explicó por algunos productos específicos de la canasta. La inflación mensual del 0,9 % se atribuyó principalmente a los mayores precios de la carne vacuna y los rubros volátiles, aunque se vio contrarrestado por la disminución de los precios de los combustibles.

En términos interanuales, la inflación fue 3,4 %, inferior a la tasa registrada en diciembre cuando estuvo en el orden del 3,7 %. Por su parte, la inflación del IPCSAE se situó en 0,4 % mensual y 3,6 % interanual. En cuanto a las expectativas de inflación, las mismas se han mantenido en línea con la meta del 4,0 % para todos los horizontes consultados.

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