La industria textil está creciendo en gran manera año tras año en Paraguay y uno de los sectores que más trabajo otorga al rubro es el uniforme escolar, cuya demanda se da principalmente entre enero, febrero y marzo por el inicio de clases, pero también en otras épocas del año, explicó el economista y empresario Ronald Starsembaum.
El mismo indicó que la confección de los uniformes para el colegio mueve a la economía tanto regional como local y otorga mano de obra a todo el país, no solamente se concentra en Asunción y Gran Asunción. Con respecto a los precios, dijo que en comparación al 2023, no hubo un aumento importante como sí se dio en el periodo 2021-2022 y 2022-2023.
“Si me preguntan qué tal anda el mercado, tengo que decir que no anda mal. Los precios no tuvieron un incremento violento, con respecto al año pasado. La industria de la confección es fuertísima a nivel de uniformes para colegios. Durante el alto verano, el alto invierno y la época escolar, esos son los tres hitos importantes que tiene la industria de la confección”, manifestó el empresario a la 780 AM.
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Si bien indicó que la ropa social o en general, que no es personalizada, tiende a generar más competitividad, el uniforme escolar no da tregua, más aún en época veraniega. Acerca de la importación, mencionó que los tejidos que proceden de China o Brasil generan una afrenta muy fuerte para la industria local, pero que particularmente duele menos en uniformes escolares.
“El mercado tuvo un crecimiento genuino y no con fines de exportación. Las marcas nacionales venden, los que realmente venden, no es que venden y fabrican para reexportar 3 o 4 veces más de lo que se consume en el mercado local”, precisó.
Finalmente, contó que uno de los problemas que enfrenta la industria de la confección es la falta de costureros, exceptuando a las fábricas grandes. ”La costura era una tradición familiar. La abuela era costurera, la mamá era costurera y la joven era costurera. Hoy esa niña de 18 años ya no quiere ser costurera”, expresó.
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