El diplomático brasileño y titular de la Asociación Brasileña de Productores de Trigo, Rubens Barbosa, planteó la creación de una autoridad internacional que se encargue de operar en la Hidrovía Paraguay- Paraná, de modo a evitar conflictos como el actual que se originó ante la decisión unilateral de Argentina de cobrar un peaje.

“Los barcos que pasan por la hidrovía, cuando llegan a otros países, tienen que cambiar toda la tripulación; hay costos en esto. Con una autoridad internacional aumentaría la seguridad jurídica y atraería inversiones para desarrollos regionales con nuevos puertos y almacenes a lo largo de todo el trayecto, desde Puerto Suárez, en Brasil hasta Nueva Palmira, en Uruguay”, dijo.

Fue durante el conversatorio Plaza Pública Dende, en el que el exembajador de Brasil en Inglaterra y Estados Unidos, actualmente involucrado con el sector privado, estuvo de invitado y lanzó la propuesta con la idea de evitar que los intereses particulares de cada uno de los países que utilizan esta vía fluvial para el transporte de sus productos no influya en el resto ni en las relaciones regionales.

Explicó que para viabilizar su idea, es necesario una modificación al acuerdo de transporte fluvial ante la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi). Con lo que se podrá permitir a esta autoridad internacional manejar todo lo relacionado con la hidrovía, como el mantenimiento, la señalización, entre otros servicios, y así evitar disputas entre los países.

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El referente brasileño también abarcó la posibilidad de construir la esclusa de navegación de Itaipú e incorporar en el circuito a la hidrovía Tieté-Paraná, de modo que el transporte de productos sea completamente en barcazas, sin necesidad de cambiar de modal.

Al respecto, indicó que el río Tieté, que atraviesa San Pablo, tiene un transporte muy grande de mercancías, a lo que sumó que la esclusa de Itaipú está incluida, de hecho, en el propio Tratado, pero no se llegó a avanzar con ello.

“El aumento del tráfico de la hidrovía por el auge de la agricultura y de la minería en la región de los Andes puede ser de interés de las empresas que necesitan de transporte. La esclusa y la autoridad internacional darían a la hidrovía otra performance y actuación regional. La hidrovía es un proyecto simbólico de integración regional”, resaltó.

En similar contexto, añadió que tanto la hidrovía Paraguay-Paraná, la negociación de Itaipú como el Corredor Bioceánico deberían de ser el foco de la relación entre Paraguay y Brasil en los próximos años. Para Barbosa, la conexión del Bioceánico, que sale del puerto de Santos en San Pablo, Brasil, pasa por Paraguay, Argentina y va a Antofagasta, Chile, permitirá ahorrar costos, al evitar el paso por el Canal de Panamá para llegar al mercado de Asia.

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