Desde la llegada de los pagos electrónicos a la zona del Chaco, tanto usuarios de pequeños establecimientos como microemprendimientos, así como los propios clientes, encontraron una solución en sus quehaceres, herramientas que sin duda ayudaron a mejorar la calidad de vida de los pobladores.
Así lo indicó Karina Vallejos Rodríguez, hija de la propietaria de “Despensa Rodríguez” que había iniciado el negocio familiar hace 8 años, y hoy junto con sus hermanos lideran el emprendimiento con la incorporación de la tecnología a través de los pagos digitales, que se posicionaron para brindar experiencias de acceso a servicios.
“Lo que empezó como un pequeño negocio, fue creciendo con el pasar de los años, nosotros nos empezamos a involucrar hasta que introducimos el POS dinelco.®. Los clientes están muy contentos porque ya no tienen la necesidad de ir a ciudades lejanas a retirar o a efectivizar su dinero”, expresó Vallejos.
Aseveró que desde que empezaron con el sistema electrónico, la cantidad de clientes creció y sigue aumentando, pues sus compueblanos de la ciudad de Filadelfia, ya no tienen que trasladarse, facilitando de esta manera a la comunidad los servicios financieros, aportando así a la inclusión al sistema.
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Acceso a programas sociales
Con la llegada e implementación de los equipos o POS, aumentaron a la vez el acceso a los programas sociales y subsidios del gobierno, que tiene como principal objetivo llegar a las zonas más vulnerables del país. Desde que empezaron con este servicio, los clientes aprovechan los cobros de Tekoporã y Tercera Edad, mencionó la joven.
Lo que como comercio les conviene, por la facilidad que representa el uso de tarjetas, que además de cobrar dichas asistencias en el local, los clientes también se abastecen de mercaderías, ropa y más pagando con sus tarjetas, con la posibilidad incluso de darles el vuelto en efectivo.
Es así que validó el impacto que representa el uso de un POS con los clientes, ya sea para pagar asistencias sociales, realizar compras o retirar efectivo, con lo que se logra mejorar la calidad de vida de las comunidades y la experiencia en el acceso a servicios.
Los comercios usuarios resaltan a la vez la seguridad en la gestión de pagos y cobros de dinero, siendo uno de los servicios más útiles el de efectivizar, pues mucha gente todavía no sabe retirar dinero de un cajero o le resulta más confiable su despensero de barrio para retirar su plata.