A 5 años de la fundación de la Asociación de Mipymes del Paraguay, Fuerza Industrial (Asomipymes) comparte con La Nación/Nación Media los logros obtenidos como gremio, los desafíos del sector y cómo les encuentra esta fecha del Día Internacional de las Micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), que se conmemora hoy 27 de junio.

La fecha fue proclamada en el 2017 para su celebración mundial por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y un año después, un grupo de 70 socios fundadores crearon la Asomipymes en Paraguay, con el objetivo inicial de proporcionar información a los microempresarios, ya que no existía un centro de atención.

A la fecha son unos 225 socios activos que, multiplicado por 3 integrantes como mínimo en cada microempresa, supone al menos 650 personas a las que vienen asesorando, según datos compartidos por la presidenta de Asomipymes, Guillermina Imlach.

La referente del sector enumeró a la vez algunos hechos considerados como logros por el gremio, al tiempo de recordar que en la pandemia tuvieron muchos desafíos, a la par de incrementar la cantidad de socios. “Nos tocó el rol de dar informaciones fidedignas de lo que pasaba con el sistema de trabajo del ecosistema de las mipymes, como los impuestos o mismo con el tema de las vacunas”, expresó la titular del gremio.

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Pero lo más resaltante para la Asomipymes fue conseguir el periodo de gracia en el acceso a créditos con el sistema financiero, lo cual ayudó a paliar la coyuntura económica, así como la exoneración de multas a las microempresas por parte del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Mtess), dijo. Destacó a la vez la creación y funcionamiento del Centro de Atención al Emprendedor (CAE), al cual las mipymes pueden recurrir para una asistencia totalmente gratuita, dijo.

No obstante, la presidenta de la Asomipymes lamentó que el Día Internacional a las Mipymes les recuerda que las microempresas paraguayas aún no cuentan con políticas públicas que las proteja como segmento importante, considerado como “motor de la economía”, por lo que los clamores también son varios.

“No tenemos la diferenciación de las grandes empresas. El seguro social que un emprendedor paga es el mismo que el de una empresa corporativa, o que un microempresario del interior como San Pedro, todavía tenga que venir para hacer su registro en el INAN o muchas otras instituciones que solo se encuentran en la capital”, señaló Imlach.

Ante todo el escenario señalado, se originó la consulta de, más allá de los números fríos que siempre se escuchan sobre que las mipymes son más del 70 % de la fuerza productiva del país, cuál es el alcance de estas y a cuántas familias involucra en Paraguay. A lo que la presidenta de la asociación indicó que conforme a datos de la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), existen más de 265.000 microempresas que tributan.

Pero de estas 265.000 mipymes, apenas 35.000 están registradas en el sistema de seguridad social del Instituto de Previsión Social (IPS), es decir, solo un 13 %. Con esto se puede entender que 230.000 no son formales, aunque también muchas están registradas como cuentapropistas o independientes que facturan y, por ende, sin estar aseguradas, explicó.

Es aquí cuando la gremialista justifica, de cierto modo, que para una microempresa con 3 a 4 trabajadores resulta un monto elevado tener que abonar un 16 % del salario para asegurar a un colaborador, con lo que se denota la falta de políticas hacia las mipymes, al tener que pagar una microempresa que factura quizás G. 20 millones al mes, lo mismo que una grande que rentabiliza G. 1.000 millones mensuales. Este es el desfasaje por el cual muchos no se formalizan, justificó. “Una empresa grande debería pagar más y las mipymes, a las que nos resulta muy difícil absorber tantos costos, abonar un monto menor”, recalcó Imlach.

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Si bien no cuentan con cifras específicas del alcance global, sostuvo que el 50 % de este ecosistema es informal; por muchos factores en los que también suman los internos, por lo que no se trata de solo querer operar en la informalidad, sino más bien se da debido a que la estructura no les permite ser formales o les resulta muy costoso, mencionó.

Es así que como gremio y sector todavía tienen muchos desafíos, por lo que también las esperanzas están puestas en el nuevo gobierno, que deberá poner la mirada hacia las mipymes, dijo, minimizando la burocracia en las gestiones de formalización por sobre todo.

Así también, esperan que la nueva normativa de compras públicas pueda beneficiar realmente a las microempresas, así como el seguro social que precisan sea acorde al tamaño de la empresa, que las mismas puedan realizar gestiones en cada municipio, de modo a evitar tanto sobrecosto para la formalización, auguró la presidenta de Asomipymes.