El presidente de la Administración Nacional de Electricidad (Ande), Félix Sosa, abordó la situación de los clientes que se encuentran en situación de mora, los cuales son catalogados en dicha categoría a partir de la segunda factura sin pagar y desde la tercera se pasa a la orden de corte, para lo cual se dispuso una serie de promociones como alternativa para no dejar de percibir el suministro.

“De la cantidad de desconexiones, aproximadamente el 70 % de los clientes que recibieron orden de corte o incluso se les llegó a cortar el suministro se acerca a pagar o a negociar el fraccionamiento. Y acá vemos la estrategia eficiente en el pago por corte en el suministro del servicio de energía eléctrica que brinda la Ande”, expresó Sosa este lunes en contacto con “Así son las cosas”, emitido por Universo 970 AM/Nación Media.

Indicó que los clientes en mora son más de 300.000, en baja tensión, y a este grupo le fue facilitada la forma de pago, ya que la deuda total de los clientes particulares en media y baja tensión ronda los USD 200 millones, con 2 o más facturas pendientes. Aclaró que el corte se realiza si se llega a tres facturas impagas, en caso que el cliente no tenga fraccionamiento.

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Explicó que el fraccionamiento fue diseñado para los clientes que se encuentran con 3 o más facturas pendientes, o si abona al contado se le puede exonerar los intereses, pero si dentro de estos parámetros se vuelve a tener dificultades para abonar, pueden acercarse a atención al cliente de la Ande para evaluar a profundidad el caso, indicó.

En cuanto a la situación de las conexiones clandestinas, Sosa señaló que la administración registra pérdidas de aproximadamente 25 %; de las cuales 6 % son por línea de transmisión, un 11 a 12 % de pérdidas a nivel de distribución, especialmente en zonas rurales, y un 8 % aproximadamente como pérdidas comerciales o específicamente por robo de energía eléctrica.

De los 8 % de operaciones clandestinas, 5 % es lo que se puede recuperar con la incorporación tecnológica que es a lo que la Ande apunta, de modo de poder identificar los sectores de mayor vulnerabilidad, para lo cual se estuvo realizando una serie de instalaciones de llaves telecomandadas en las líneas, a más de un centro de control en los medidores más el balance energético de la facturación por zona.

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