La industria nacional continúa siendo afectada por el contrabando de productos y es por ello que desde el Centro de Importadores del Paraguay (CIP) explicaron que el gremio propone hacer algo distinto a lo que se viene haciendo históricamente. En ese contexto, Ivan Dumot explicó que plantearán utilizar un modelo similar al sistema de control de Brasil con una estructura multiaérea comprendida por varias barreras de control.
“Ellos sacan realmente a la calle una estructura multidisciplinaria donde la primera barrera de control es Aduanas y la Armada, luego se pone otra del área militar, después del Ministerio de Industria y Comercio, y otros estamentos que puedan colaborar en la lucha contra el contrabando”, sostuvo. En resumen, todo esto haría más difícil el proceso al comercio ilegal de productos a gran escala.
Dumot refirió que buscarán conversar con el presidente electo de la República, Santiago Peña, para presentar la propuesta con varios gremios afectados a modo de que la coyuntura no siga empeorando, puesto que todos los que trabajan en la formalidad son afectados por la competencia desleal, no solo los importadores, sino los industriales, la Cámara de Supermercados, entre otros.
Puede interesarle: Sector agrícola espera que reconozcan sistema sustentable de producción
En el caso de las ventas ilícitas a menor escala que se puedan dar bajo el régimen de pacotilla, dijo que hoy los límites son difíciles de contener. “Lo que más nos preocupa es el que es a gran escala, porque una vez que entra al país es absolutamente incontrolable”, aseguró a la 650 AM, por lo cual los controles de acceso de una manera distinta podrían funcionar contra la problemática.
Además de esto, dijo que la distorsión del sistema cambiario argentino actúa como un combustible financiero para que los extranjeros vengan a Paraguay con pesos en negro, buscar cambistas en la calle y hacer una operación de cambio en efectivo. Lamentó que las leyes que regulan la actividad de los cambistas no estén reglamentadas, y acotó que ante este segmento tenía inscriptos en el Banco Central del Paraguay a unas 150 personas que actualmente suman 1.500.