Los productores nacionales de calzados se encuentran concentrados en la temporada otoño-invierno y a la espera de que el clima pueda ayudar a un repunte del sector. En ese sentido, desde la Cámara de la Industria del Calzado (CIC) expresaron que tienen la expectativa de que este año puedan registrar un crecimiento en la producción de al menos un 20% respecto al 2022, atendiendo a que con la vuelta a clases se dio una leve mejoría.
Elder Otazo, presidente del gremio, explicó este sábado en contacto con La Nación/Nación que los locales del rubro están totalmente cargados con los productos de invierno, tanto los de fabricación con calzados de cuero como los sintéticos. ”Estamos esperando únicamente que el clima vaya ayudando un poco más. Si bien el fresco se está dando, todavía falta un poco más. En mayo o junio tenemos el pico alto en la venta de calzados de invierno”, refirió.
Sostuvo que si bien todavía no se tienen reportes de los asociados sobre el desarrollo de las ventas en esta estación, los fabricantes continúan esperando despachar mejores cantidades. “Eso es lógico porque todavía no es la temporada alta de estos productos. Si el frío no viene en su debido momento, por decirte en la próxima semana, sí se podría hablar de una merma, pero esto es semana a semana”, manifestó, agregando que los pedidos se dan de acuerdo a las bajas temperaturas.
Puede interesarle: Mantienen tasa de interés de política monetaria en 8,5 % anual
Manifestó que el mercado nacional del cuero puede llegar a contener entre 80% y 90% de insumos nacionales, que son procesados por más de 500 fábricas de calzadistas que se abocan a las ventas locales. Como desafíos para el sector en los siguientes meses, dijo que se dependerá de la capacidad de compra de los clientes para que los artículos sigan posicionándose, llegar a los niveles prepandemia, y la lucha contra el flagelo contrabando para que mejore la participación.
Hay que mencionar que según los resultados de investigación del “Análisis sectorial del rubro calzados de cuero en Paraguay”, realizado por la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Americana durante el año 2021, se identificó una necesidad en el segmento de las mipymes en el acceso a nuevos espacios y mercados locales para la comercialización de sus productos en grandes tiendas, centros comerciales, plataformas digitales y redes sociales para llegar a los consumidores actuales, quienes adquieren estos productos principalmente en esos canales.
Asimismo, se debería apalancar al sector a través de programas e iniciativas existentes ya sea en el acceso a créditos o en tecnología. En este sentido, resultará importante dar a conocer los programas de incentivos a la innovación, con instituciones públicas o privadas para que las economías puedan incentivarse atendiendo la disponibilidad de una buena calidad del cuero para la producción.
Lea también: Con etiquetado frontal de alimentos se podrían reconocer productos de contrabando