Según un estudio recientemente divulgado, la economía subterránea o informal creció nuevamente en el 2022 y generó un movimiento de US$ 22.019 millones. Señalan que la vuelta a la normalidad, después de la pandemia, fue el principal factor que dejó ver que la informalidad creció.
La organización Pro Desarrollo Paraguay, con la Consultora Mentu como aliado, publicó los datos de su estudio denominado Economía Subterránea “Algo tenemos que hacer” en donde demostró los números de la economía subterránea en Paraguay con datos actualizados en comparación con los últimos dos años.
En ese sentido, mencionaron que la medición de la economía informal en Paraguay en el año 2021 resultó en un valor de US$ 21.210 millones, lo que equivale al 44,3% del Producto Interno Bruto (PIB) de ese año, indicando una disminución del 1,9% con relación a las estimaciones del año 2020.
Mencionaron que estos datos confirmaron al cierre del tercer trimestre de ese año en donde con la reactivación gradual de la economía, parte de los desempleados, principalmente aquellos que quedaron fuera del mercado laboral, fueron reincorporados a las actividades formales.
Sin embargo, la estimación de la economía subterránea para el 2022 vuelve a aumentar, con datos observados hasta el tercer trimestre de dicho año, donde los resultados indicaron un aumento del 1,6% con relación a lo estimado para el año 2021. “Así, la economía informal asciende a US$ 22.019 millones, equivalente a 45,9% del PIB”, destacaron.
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Afirman que el 2022 fue el primer año de la vuelta real a la normalidad tras la pandemia, y que la economía informal se relaciona de manera directa con la economía formal, es decir, la economía formal se nutre de la informalidad. En ese sentido, indicaron que la pandemia fue un factor exógeno que demostró que en Paraguay la economía informal es principalmente de subsistencia y está relacionada con la falta de empleo.
De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) expuestos en este estudio, la ocupación informal aumentó durante la pandemia, mientras que la ocupación formal disminuyó al tiempo que la tasa de desempleo aumentó. Para este año, se verificó que la economía informal creció, mientras que el desempleo siguió descendiendo y el nivel de ocupación formal aumentó.
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