Representantes del Centro de Empresarios de Transporte del Área Metropolitana (Cetrapam), Cesar Ruiz Díaz y José Tomás Rivarola, arremetieron contra el sistema estatal con relación al manejo del subsidio para el sector y la falta de pago que ya acumula una deuda de 5 meses, al tiempo de dar su versión respecto al servicio reducido en la cantidad de buses que ofrecen actualmente.

“Tendremos nuestra cuota de responsabilidad, claro que la tenemos que tener, hay que analizarla. Pero yo soy del criterio muy sencillo, tienen que honrar el compromiso para poder exigir porque ya llevan 5 meses de atraso”, expresó el empresario Ruiz Díaz a la 780 AM.

Alegó que desde hace meses vienen operando con 43% menos de ingresos, lo cual no les permite comprar el 100% de combustible que necesitan, por lo que se vieron en la obligación de ajustar la capacidad de compra, lo cual se refleja a la con la reducción de las frecuencias, explicaron.

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Sobre el punto, aseguraron que de manera responsable remitieron unas notas al Viceministerio de Transporte y al Ministerio de Hacienda, explicando que de no darse las soluciones respecto al pago de la deuda, no podían garantizar la prestación del servicio en términos normales. Es decir, el gobierno solapó con las reguladas su falta de pago.

El 57% del precio del pasaje lo paga el pasajero, y el 43% lo paga el subsidio que ya acumula 5 meses de atraso. Foto: Roberto Zarza.

No pueden garantizar buen servicio

Es así que, el empresario al ver cercenado el 43% de sus ingresos, teniendo en cuenta que dicho porcentaje es lo que cubre el subsidio, más la obligación de prestar el servicio, lo que tiene que hacer es tratar de bien utilizar todos o los pocos recursos que dispone de modo a prestar un servicio relativamente acorde a lo que recibe, indicaron.

Asimismo, abordaron que el contexto actual que se viene arrastrando desde finales del año anterior, no les permite renovar buses, ni comprar repuestos de primer nivel, o abastecerse de cubiertas nuevas que sí garanticen un rodamiento de 90 mil kilómetros.

Por lo tanto, como resultado de todo este desfasaje acostumbrado denominado por Hacienda como “proceso normal”, al pago atrasado de subsidios, lo que se obtiene es el envejecimiento de la flota etaria o lo que comúnmente se conoce como el “pésimo servicio” del transporte público de pasajeros.

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