Infaltable en la mesa. Sea en sándwiches, acompañamientos en snacks, mantequilla en confitería o en helados, el maní o cacahuate, es una materia prima fundamental y una importante fuente de calorías para satisfacer las demandas nutricionales.

Hypergrain SA, una empresa nacional con casi una década en los mercados internacionales, se consolidó en los últimos años como la mayor exportadora a EEUU del maní paraguayo de producción sostenible, enviando 4.000 toneladas anuales, de las 7.000 producidas, superando ampliamente la exportación del sector.

Además de EEUU, otra parte importante se destina a Brasil, con una exportación de 1.500 toneladas por año y, adicionalmente, 1.500 toneladas para otros países y el mercado local. La mayoría del maní exportado por Paraguay se envía en contenedores, teniendo como destino las industrias alimenticias y confiteras.

Con una planta procesadora en Eusebio Ayala y otra próxima a inaugurar en la ciudad de Caraguatay, ambas en el departamento de Cordillera, se convierte en uno de los motores para el desarrollo comercial de dicha zona del país.

La empresa, que también exporta chía y sésamo, emplea directamente a 100 funcionarios e impacta positivamente en la economía de las familias y el comercio de la zona, además, representa ingresos para más de 300 proveedores y prestadores de servicios.

Con respecto a su producción, acopia en casi toda la Región Oriental y parte de la Occidental, trabajando aproximadamente con 1.800 pequeños y medianos productores, individuales o nucleados en cooperativas y también con comunidades indígenas.

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Para Shoichi Takahashi, presidente de Hypergrain, el valor fundamental de su empresa es trabajar con la agricultura familiar mediante servicios gratuitos que brinda la empresa en cuanto a asistencia técnica y extensión rural, que estimulan la adopción de innovaciones tecnológicas en la agricultura sostenible.

“Nuestra planta cuenta con certificación internacional, de manera que apoyamos a las producciones familiares en los procesos de comercialización de sus productos, con gran compromiso social. Nos alegra saber que estamos siendo un importante puente para el desarrollo de nuestros asociados principales, que son los pequeños productores, mayoritariamente campesinos que tienen asegurado su sustento, con la garantía de la compra”, refirió a La Nación/Nación.

El Paraguay se ha consolidado en esta producción, tanto que existen clientes internacionales que aseguran la llegada del preciado grano a través de reservas que incluyen pagos anticipados, acotó Takahashi.

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La conquista de los mercados internacionales no se realiza de un día a otro. Para el efecto, las empresas deben invertir en permanentes participaciones en ferias internacionales como Biofach, Anuga y Sial en Europa; Expo West, Expo East, Expo IFT (Institute of Food Technologists) en América del Norte; Gulfood, Food Taipei, Fine Food en Asia, entre otras.

“Es importante destacar la labor de Rediex, que apoya la participación de las empresas paraguayas y es un aliciente sentir esa confianza”, sostuvo Takahashi, refiriéndose al trabajo desarrollado por el Ministerio de Industria y Comercio a través de su Red de Inversores y Exportadores (Rediex).

“Cada feria implica una inversión, pero cada presencia ratifica el compromiso con los clientes actuales y la apertura de nuevas oportunidades”, remarcó.

Un aval importante para la empresa a nivel internacional son las certificaciones como las de USDA/NOP de los Estados Unidos; UE de la Unión Europea; JAS del Japón; COR de Canadá; BPM Buenas Prácticas de Manofactura.

La lista sigue con el Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control, también conocido como sistema HACCP (Hazard Analysis and Critical Control Points) y Kosher y Halal, estos últimos para los mercados de Israel y países árabes.

Actualmente, la empresa se encuentra en proceso de obtener la certificación BRC (British Retail Consortium Global Standard para la inocuidad alimentaria), la ISO 22.000 y la marca país, entre otras.

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