Durante este mes se registran variaciones de precios de varios productos alimenticios -como los de uso doméstico-, lo que podría incidir en los indicadores de corto plazo. La alta demanda de la época representa un factor fundamental para que se registre esa alteración.
La Semana Santa y las semanas previas significan un aumento de la demanda de varios productos, especialmente los del sector alimenticio, lo que generalmente repercute en los precios de los mismos debido al quiebre que se da en la curva con la menor oferta.
Sobre ese punto, el economista jefe del Banco Central del Paraguay (BCP), Miguel Mora, indicó que esa situación podría representar como un factor importante en la determinación de los próximos resultados, pero agregó que existen muchos elementos que podrían afectar, principalmente la confianza del consumidor, en el próximo mes.
Explicó que existen aumentos de precios en algunos productos que en periodos como este suben por la mayor demanda, pero acotó que otros productos muestran una reducción en sus valores, lo que podría mitigar el impacto negativo en los indicadores de corto plazo.
En ese sentido, señaló que el precio de los combustibles se redujeron levemente y además añadió que la actividad económica durante este último mes, según los datos de la matriz bancaria, experimentaron incrementos en este periodo, lo que genera mayores expectativas en los agentes.
“Una mayor actividad económica se traduce siempre en mayor empleo y en mayor ingreso. Podría estar relacionado al aumento de precios, pero también depende de los demás elementos, además del factor externo, el comportamiento del dólar de manera internacional y su implicancia en la economía local”, añadió.
En el mes de febrero, el índice de confianza del consumidor se ubicó en 52,8 puntos, menor al 57,5 puntos del mes anterior, pero superior al 50,8 del año anterior. Así también, se observaron reducciones en el índice de situación económica y las expectativas económicas, pese a que se siguen ubicando en zonas de optimismo.
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