El Ministerio de Economía del gobierno argentino declaró este lunes pasado el estado de emergencia y/o desastre agropecuario a las explotaciones afectadas por la sequía en distintas localidades de la provincia de Buenos Aires en el marco de la Ley Nº 26509. La medida se adopta en el marco de la sequía que afecta a distintas explotaciones agropecuarias en la provincia.
La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) estima en más de US$ 14.000 millones la pérdida que la sequía generará en las producciones de soja, maíz y trigo, los tres principales cultivos de este país. Y si se le suma el impacto en otros sectores de la economía, las pérdidas totales podrían llegar a US$ 19.000 millones, que representan 3 puntos porcentuales del producto interno bruto (PBI) argentino estimado para 2023.
Con dicha resolución se declara y/o prorroga el estado de emergencia a las explotaciones agropecuarias afectadas desde el 1 de junio de 2022 y hasta el 31 de marzo de 2023, en los distintos partidos o departamentos de la provincia de Buenos Aires específicamente afectados.
La normativa determina como fecha de finalización del ciclo productivo en algunos partidos hasta el 31 de diciembre de 2022 y en las zonas afectadas hasta el 31 de marzo de este 2023. Dicha ley habilitó las prórrogas en el vencimiento del pago de los impuestos de modo de extenderse hasta el próximo ciclo productivo a aquel en que finalice el citado período de emergencia y/o desastre.
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Asimismo, en fecha 16 de marzo, según Resolución 290/2023, el Ministerio de Economía también declaró a los efectos de la aplicación de la 26509, a la provincia de Córdoba en estado de emergencia y/o desastre agropecuario, según corresponda, desde el 1 de enero de 2023 y hasta el 30 de junio de 2023 a las explotaciones agrícolas, forestales y frutihortícolas afectadas por sequía en las zonas delimitadas.
La resolución establece el marco de emergencia desde el 1 de enero de 2023 hasta el 31 de diciembre de 2023 a las explotaciones ganaderas, tamberas y apícolas afectadas por sequía en las zonas delimitadas por las autoridades pertinentes. Ambas resoluciones facultan a los productores afectados acceder a beneficios, quienes para gozar de ellos deberán presentar certificado extendido por la autoridad competente de la provincia, en el que conste que sus predios o explotaciones se encuentran comprendidos en los casos previstos en la Ley Nº 26509.
Además de la sequía, Córdoba es la provincia más afectada por el brote de gripe aviar en Argentina. Según el último reporte del viernes pasado, de las más de 300 notificaciones analizadas por el laboratorio del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), existen 58 casos confirmados, en aves de traspatio (48), silvestres (4) y sector comercial (6) distribuidos de la siguiente manera: 18 en Córdoba, 15 en Buenos Aires, 7 en Neuquén, 6 en Santa Fe, 4 en Río Negro, 2 en San Luis, 2 en Chaco, 1 en Jujuy, 1 en Santiago del Estero, 1 en Salta y 1 en La Pampa.