El candidato a presidente de la República, Santiago Peña, mantuvo un encuentro con los principales gremios de la construcción en el país a fin de conversar sobre la infraestructura en el próximo gobierno. El presidenciable destacó, que se apuntará al promedio de inversión pública en la región a través de la mejora de la economía.
Con la presencia de los representantes de los principales gremios de la construcción, el candidato por la Asociación Nacional Republicana (ANR), Santiago Peña, habló acerca de su ideal respecto al camino que tendrá la construcción pública durante su período de gobierno y mencionó que el nivel de inversión en donde Paraguay podría ser protagonista en materia de infraestructura es del 5% del producto interno bruto (PIB), es decir, unos US$ 2.000 millones.
Señaló, que ese nivel de inversión en las obras públicas durante su gobierno tendrán lugar a través de un crecimiento económico y del aumento de la base tributaria en el país. “Nosotros tenemos una economía de US$ 40.000 millones, esa es la economía formal, pero tenemos US$ 24.000 millones que es de la economía subterránea, que no pagan impuestos, que no paga las cargas sociales”, explicó.
Sobre ese punto, mencionó que parte de esa economía es ilegal, pero añadió que un porcentaje muy importante es informalidad por lo que consideró que el desafío es cerrar el círculo para que cada vez sea más difícil la informalidad, para lo cual sugiere un sistema que no solo persiga al evasor, sino también que le permita al formal ser cada vez más competitivo.
Para ello, indicó que le gustaría generar una revolución del empleo que implicaría que las empresas comiencen a contratar más personas, lo que a su vez, se lograría a través del mayor ingreso de estas. “Que le está impidiendo a las empresas tener mayor ingreso, muchas veces es el financiamiento, muchas veces desde la misma decisión del Estado le estamos imponiendo. Creo que un tema que está en el ambiente del gremio de la construcción es el atraso”, mencionó.
En ese sentido, manifestó que ya había conversado con varios integrantes del sector y detalló que no tiene ninguna lógica que el Estado hoy le imponga costos a la economía paraguaya debido al no pago a los proveedores. Señaló que por una decisión unilateral del Ministerio de Hacienda se le está poniendo este costo a la economía del país y se está cortando la cadena de pago atendiendo a que al no darse el pago a las empresas proveedoras, estas no pueden cumplir con sus obligaciones.
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“Creo que va a ser un tema que se va a tener que discutir en el ámbito político. Tenemos deudas que se han acumulado por a o b motivo, pero tenemos que reempaquetar estas deudas porque el Estado tienen que emitir a una tasa de interés del 4 al 5% y salir a pagar a los proveedores y eso va a inyectar liquidez, pero principalmente se va a ir a pagar las deudas en los bancos”, añadió.
Puntualizó que para lo que buscan lograr durante el próximo gobierno no hay mucho secreto, ya que aseguró que la teoría económica y la práctica han demostrado que generar crecimiento va a realizar que la economía se dinamice, que se generen nuevos polos de desarrollo, que existan más inversiones lo que derivará en más recursos para el Estado que se podrá destinar en obras públicas.
También mencionó que el nivel de inversión del 5% del PIB podría darse además a través de las alianzas público-privadas y que la licitación de la Ruta PY01 sea el inicio donde más empresas paraguayas se consorcien para desarrollar un conocimiento muy específico que tenga la administración del manteniendo de las rutas construidas.
Tope al gasto corriente
El candidato fue consultado además sobre el tope de responsabilidad fiscal, debido a que resulta en la mayor preocupación de todo el sector por su incidencia que podría tener en la inversión en obras públicas. Peña destacó su participación en la implementación en la versión original de la ley de Responsabilidad Fiscal y apuntó a que las reglas hay que cumplirlas.
No obstante, recordó que la idea que mantiene sobre el tope es que esté concentrado sobre el gasto corriente, es decir, el pago de salarios, lo que considera fundamental debido a que el Estado es un prestador de servicios. Sin embargo, explicó que el otro componente del gasto, refiriéndose a las inversiones, tiene un retorno económico debido a que genera un efecto multiplicador en el sector privado.
“En salarios no hay efecto multiplicador, entonces lo que se busca es contener el gasto corriente, que no crezca el gasto corriente. La idea es tener una regla fiscal o una ley de responsabilidad fiscal que ponga un límite sobre el gasto corriente generando más espacio para la inversión en gasto de capital”, dijo el presidenciable y agregó que existe un proyecto que explica cómo Paraguay puede salir del déficit fiscal sin tener que perjudicar la inversión en infraestructura que es la que genera crecimiento económico.