El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina informó por la noche del martes 28 de febrero sobre un nuevo caso de la influenza aviar (IA), esta vez en la provincia de Río Negro, ya hacia la zona central del sur de este país.
De esta manera, el servicio de sanidad confirmó el primer caso en un ave de corral, específicamente en un establecimiento de pollos parrilleros en Mainque (Río Negro), ubicado al sur de la barrera zoofitosanitaria, zona de baja densidad avícola por lo que llama la atención y agrava la preocupación al tratarse ya para el segmento comercial.
Con el nuevo detectado suman 25 en total los casos confirmados, de los cuales 3 se dieron en aves silvestres, 21 en aves de traspatio y ahora 1 en el sector comercial, respecto al caso en el establecimiento de pollos parrilleros en Mainque.
A la vez, el reporte diario del Senasa indica que los casos están distribuidos de la siguiente manera; 13 en Córdoba que sigue siendo el principal foco de infección, 4 en Buenos Aires, 2 en Río Negro, 2 en Santa Fe, 1 en Jujuy, 1 en Neuquén, 1 en San Luis y 1 en Salta.
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Las autoridades del país vecino tuvieron que suspender las exportaciones de los productos avícolas argentinos, lo cual responde a las exigencias de la normativa internacional, pero aclararon igualmente que sus productos siguen siendo seguros para los argentinos.
Hay que mencionar que la región y otros países del continente americano se encuentran trabajando para evitar la propagación de la gripe aviar en sus territorios, y, en Paraguay específicamente que no registra aún casos positivos pese a algunas sospechas denunciadas, las labores giran en torno a la prevención y el extremo cuidado de las medidas de bioseguridad.
Brasil sigue igual que Paraguay, sin casos, mientras que Uruguay reportó un centenar de casos, pero con la variante de que se mantiene en una sola especie en particular, que sería el cisne negro, desde su primera aparición, el 14 de febrero. En tanto que en Bolivia, más de 218.000 aves de granja y traspatio murieron o fueron sacrificadas hasta la fecha del 23 de febrero.