Denuncias publicadas por internautas sobre los cobros considerados excesivos a los turistas en una de las playas de Carmen del Paraná, que emerge como atractivo en el departamento de Itapúa, se develan a través de unos carteles instalados en el lugar que indican una señalización diferenciada del sector VIP o para “personas muy importantes” de las generales, a pesar de que el acceso a las playas es libre.
Según las señaléticas para acceder a la zona VIP, que es la que dispone de tarifas establecidas conforme se observa en el cartel, si el turista quiere ingresar con bebidas propias debe abonar G. 3.000 por cada una, G. 5.000 por cada silla, G. 15.000 por cada sombrilla y G. 30.000 por cada toldo.
Al respecto, el equipo de canal GEN/Nación Media se acercó hasta el lugar y conversó con el intendente de Carmen del Paraná, Germán Gneiting, quien fundamentó que la zona en la que se cobra por tales ingresos se trata de un lugar exclusivo.
“Creo que es una mala intención de las personas que alzaron. Si bien el cartel existe, pero marca o delimita un sector VIP con unos cobros de servicios que también parece que la concesionaria tuvo un error que al parecer el mensaje no se entiende. Reconocemos eso, pero queremos mejorar y vamos a ver la forma de cambiar eso. Pero también está el sector generales, donde no se paga ningún servicio”, expresó el intendente.
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Es importante aclarar primeramente que Carmen del Paraná cuenta con 3 playas, y cada una está concesionada por personas diferentes del sector privado con sus propios sistemas y atractivos diferenciados, explicó Gneiting, ya que el turista que busca ruido o fiesta puede recurrir a la playa Takuary, donde se puede disfrutar de batucadas en vivo, shows de DJ y promociones de bebidas, o las playas Ybycuí o Pirayú, que son las que tienen los sectores diferenciados.
Otras playas no cobran
Y para entrar un poco más en contexto, el diario La Nación/Nación Media conversó con Willy Ávalos, gerente general de la empresa Pablos’s Food, que es una de las concesionarias para administrar específicamente la playa Takuary, donde no se cobra ningún acceso por introducir bebidas, sillones y sombrillas, y aseguró que hay opciones para todos.
“Hay una especie de mala interpretación creo de la gente por los carteles que circularon, porque están generalizando a toda Carmen del Paraná, pero eso es solo en un pequeño sector de una de las 3 playas, que es la Pirayú, que tiene 400 m, y en unos 100 metros es que se aplicó este sistema según tengo entendido a pedido de la gente misma, que quiere algo de más privacidad”, señaló Ávalos.
Es así que aseveró que las playas de Carmen del Paraná son aptas para todos y aguardan a los turistas con todas las comodidades que se pueden ofrecer en una playa, como ser los servicios de gastronomía y bebidas con un bar, cantinas, servicios de seguridad, salvavidas, de limpieza y todo lo que pueda garantizar una placentera estadía.
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Servicios proporcionados
Mencionó igualmente que en ocasiones de alta demanda se suele contar con los servicios de alquileres de sillas, sombrillas o toldos tal y como se realiza en cualquier playa, e incluso hay fechas que la cantidad de visitantes supera en gran medida, recordando que en el 1 de enero reciente pasaron al menos unas 10.000 personas solo por la playa Takuary, que en días normales mantiene un promedio de 3.500 a 4.000 personas.
Resaltó atractivos como shows especiales desde los días jueves, con los sunsets con música, DJ, promociones, happy hours, un tobogán gigante de 12 m de altura y 30 m de recorrido, alquiler de bananas gigantes y otros para el entretenimiento acuático.
Por otro lado, manifestó que mantener las playas en buenas condiciones demanda una inversión de al menos G. 10 millones semanales para el ingreso de tractores, el servicio de limpieza y demás controles que se deben realizar. También aclaró que solo en el caso de que algunas personas ingresen con conservadoras muy llenas de bebidas alcohólicas es que se solicita un aporte mínimo para garantizar el despeje de cualquier residuo.